"Días de angustia y dolor": el Gobernador de Salta pidió auxilio al borde de las lágrimas

Este martes la ministra de Salud, Josefina Medrano, dio un paso al costado y renunció a su cargo, mientras que, el gobernador Gustavo Sáenz pidió auxilio al borde de las lágrimas al admitir que “la situación es compleja” en su provincia.

“Lamentablemente tengo que decirles que la situación epidemiológica de la provincia está complicada. Estos días no fueron fáciles, fueron días de angustia y dolor para muchísimas familias”, comenzó diciendo el jefe de los salteños.

El sucesor de Urtubey reconoció que no dejarán de crecer los fallecidos por el brote de coronavirus ante el colapso sanitario en Salta y se quejó de los que “no se dan cuenta que este virus nos afecta cada día más”.

“Cada día más son más los pacientes que necesitan camas y menos los médicos que pueden acompañar y crecen los enfermeros que se contagian”, alertó Gustavo Sáenz en el tramo más duro de su discurso.

“Tenemos que hacer lo único que resultó en el mundo, la responsabilidad colectiva”, pidió el Gobernador. Por otro lado, el jefe de Salta negó que haya habido “cinco meses” de encierro total y pidió a la gente que “no seamos hipócritas”.

“Hoy necesitamos restringir y cuidarnos más que nunca”, sentenció el dirigente salteño defendiendo el endurecimiento de la cuarentena. “Les pido que me ayuden a transitar este difícil momento que me tocó gobernar”, rogó al borde de las lágrimas.

“El sistema de salud está completamente saturado. Es una deuda histórica con Salta y con el norte de nuestro país”, señaló Sáenz pero exigió a las obras sociales que se hagan cargo de sus afiliados y dejen de derivarlos al sector público, que es para quienes no tienen cobertura médica privada.

Por otra parte, Medrano dejó la dirección de la cartera de Salud y el Gobernador de Salta anunció que será reemplazada por el actual director del Hospital Señor del Milagro, Juan José Esteban.