Vuelta a clases: el transporte, el principal problema

La vuelta a clases presenciales se ha convertido en el principal tema de interés y de preocupación a nivel nacional. Por un lado, las familias necesitan que los niños y niñas vuelvan a las escuelas, no solo porque muchos empezaron a trabajar nuevamente y no tienen con quien dejar a sus hijos e hijas, sino porque también han visto mermado su proceso de socialización. Por el otro lado, gremios y sindicatos docentes aseguran que las condiciones de seguridad sanitaria no están dadas y, en el medio, el Gobierno nacional y regional intenta llegar a un acuerdo con todas las partes.

En los últimos tres meses el interés de búsqueda sobre las clases, esto es, la cantidad de personas que buscaron en Google sobre las lecciones educativas, tuvo un importante crecimiento, con dos picos máximos el 6 de noviembre (cuando el Ministerio de Educación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires anunciaba que las escuelas porteñas públicas y privadas abrirían sus aulas para recibir a más alumnos) y este 22 de enero (cuando la Unión de Trabajadores de la Educación, UTE-Ctera, confirmó que no asistiría al lugar de trabajo el 17 de febrero, como pedía el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta).

Tal como dijo el ministro de Educación, Nicolás Trotta, “la única jurisdicción donde hay un conflicto claro manifestado" respecto a las clases "es en la Ciudad de Buenos Aires”. Este martes el Gobierno porteño se reunirá con los gremios docentes para ultimar los detalles del regreso a las aulas. Su postura es inamovible: el ciclo lectivo comenzará el 17 de febrero, pero gremios como la Asociación de Enseñanza Media y Superior (Ademys) y UTE-Cetera se oponen a volver a las escuelas mientras las condiciones no estén dadas. El principal punto de objeción son los transportes.

La secretaria general de Ademys, Mariana Scayola, señaló a Todo Noticias que el protocolo presentado por CABA “no está contemplando las condiciones sanitarias” y que, para garantizarlas, "deberían haberse hecho reformas que no se hicieron en todo este tiempo". “Nos preocupa mucho el transporte público. Entre alumnos, familiares de alumnos, docentes y todos los trabajadores del sistema educativo son 1.2 millones de personas en circulación. Nos interesa que se contemple la posibilidad de un transporte para los docentes a través de la flota de micros de la Ciudad”, agregó.

Asimismo, la secretaria general de la UTE-Ctera, Angélica Graciano, reiteró en su cuenta de Twitter: “Con fake news quieren instalar que no queremos presencialidad. Ya hicimos comunicados, notas, publicaciones, pero siguen sin entender. Es muy simple: queremos presencialidad. Lo que exigimos son protocolos seguros que cuiden la salud de toda la comunidad educativa”.

Por su parte, fuentes cercanas a Horacio Rodríguez Larreta criticaron en diálogo con el medio antes citado que los gremios docentes pidan transporte exclusivo cuando “los médicos que pelean todos los días contra el virus van a trabajar en auto, en colectivo, en bicicleta, a pie o como fuere”, y concluyen que “da la sensación de que algunos tiran imposibles para tener la justificación de un paro. La cuestión es política, más que de diseño de un protocolo”.