Alberto repudió la violencia durante la marcha mientras que Macri aseguró estar "emocionado"

Decenas de personas se movilizaron en distintos puntos del país contra las “vacunas VIP”.
sábado, 27 de febrero de 2021 · 22:17

El malestar social por las “vacunas VIP”, a las que accedieron funcionarios y sus amigos a pesar de no formar parte de los grupos de riesgo o de no haber sacado turno previo, lejos de finalizarse va en aumento. Con epicentro en Plaza de Mayo, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), centenares de personas se movilizaron para reclamar “transparencia” en la campaña de vacunación contra el coronavirus. Convocados principalmente por la oposición, los manifestantes tiraron bolsas mortuorias con nombres de funcionarios frente a la Casa Rosada y, algunos, se violentaron. Mientras el presidente de la Nación, Alberto Fernández, repudiaba este accionar, el exjefe de Gobierno, Mauricio Macri, alentaba la movilización en plena pandemia.

La marcha, que se replicó en varios puntos del país, fue convocada a partir de las 17:00 horas en el centro porteño. A la misma hora fueron poblándose el Obelisco y los alrededores de la Quinta de Olivos. Entre banderas argentinas, aparecían exfuncionarios como Patricia Bullrich o legisladores como el senador por CABA, Martín Lousteau.

Si bien la exministra de Seguridad de la Nación, principal promotora de la protesta, aseguraba en su cuenta de Twitter que iban a marchar “en paz”, el saldo de hoy dista de ser una protesta tranquila. En Plaza de Mayo, la situación se tornó tensa cuando simpatizantes de la oposición y militantes del oficialismo comenzaron forcejear, empujarse y hasta pegarse. La Policía tuvo que montar un cordón de efectivos para separar a los violentos: de un lado, cantaban la marcha peronista, del otro sonaba el Himno Nacional.

Pero lo más llamativo fueron las 10 bolsas mortuorias con los nombres de las personas que habrían recibido “vacunas VIP”. Entre ellas figuraban: Daniel Scioli, la familia Duhalde, los amigos de Alberto, la mujer de Carlos Zannini, el hijo de Hugo Moyano, miembros de La Cámpora, Estela de Carlotto, el sobrino de Ginés González García, los suegros de Sergio Massa, y Martín Guzmán.

En ese contexto, Fernández se pronunció a través de la plataforma de microblogueo y escribió que: “La forma de manifestarse en democracia no puede ser exhibir frente a la Casa Rosada bolsas mortuorias con nombres de dirigentes políticos. Esta acción lamentable solo demuestra cómo muchos opositores conciben la República". En ese sentido, el presidente consideró que el hecho fue un "acto de barbarie”.

En cambio, Macri escribió por el mismo medio que: “(Está) emocionado y contento de ver como una vez más los argentinos se movilizan, demostrando que no van a permitir los abusos y atropellos del Gobierno”.

Como siempre, Argentina vive en los extremos. La unión tripartita que vimos a principios de la pandemia entre la Ciudad, la Provincia de Buenos Aires y la Nación, y que representaba el consenso entre las dos fuerzas políticas más importantes, hoy nos parece un irónico fragmento sacado de una historieta, que no se corresponde con la crisis que atraviesa hoy la República.