Qué dijo el New York Times sobre la polémica frase de Alberto Fernández

La desafortunada frase del presidente Alberto Fernández sobre el origen de los mexicanos, brasileros y argentinos recorrió el mundo. La oposición nacional defenestró al mandatario y ahora se suman medios extranjeros, como el emblemático The New York Times, que bajo una columna de opinión criticó al jefe de Estado y aseguró que Argentina debe debatir y reflexionar sobre el racismo.

Fuente: (Los Andes Diario).

Recapitulemos. La semana pasada, el presidente español Pedro Sánchez visitó la Argentina para impulsar un nuevo programa de inversión español. El socialista encabezó un acto junto con el líder del Frente de Todos y fue allí cuando Alberto, en un intento por elogiar al mandatario español, dio su polémica frase: “Los mexicanos salieron de los indios, los brasileros salieron de la selva, pero nosotros, los argentinos, llegamos de los barcos. Eran barcos que venían de allí, de Europa”.

La mirada extranjera

Si bien muchos reconocieron que la frase fue un error y no tenía un propósito mal intencionado, los reproches llovieron a raudales. Bajo el título “Argentina necesita conversar sobre el racismo. Alberto Fernández lo demuestra”, The New York Times afirma que el jefe de Estado argentino “hizo un comentario considerado racista al repetir lo que para un sector importante de la sociedad es un mantra: que los argentinos son europeos, a diferencia del resto de América Latina”.

“Para Argentina es una mala señal que alguien diga eso y más si viene del mandatario. No solo por el mal ejemplo que da, sino también porque el peronismo ha logrado, en los últimos años, avances en la inclusión de minorías a través de conquistas de derechos de las mujeres y de las comunidades LGBTI. En muchos sentidos, Fernández había dado motivos para pensar que era un líder progresista”, señala el artículo.

“La frase racista de Fernández revela la negación de las raíces mestizas y negras de su sociedad, que subyace en la formación de la identidad cultural argentina: la resistencia a reconocer que el país se forjó mediante un proceso de mestizaje complejo y a veces brutal, como el resto de la región, está bien arraigada. Y, aunque Fernández intente posicionarse hoy como un político liberal de centroizquierda, en el fondo también piensa como el sector que sigue creyendo que los argentinos son europeos”, continúa la columna, con la que critica no solo al mandatario, sino a la sociedad en conjunto.

Con un recorrido por el pensamiento de político-militares como Faustino Sarmiento y su idea de “blanquear” a la población argentina hasta la Campaña del Desierto, el artículo periodístico concluye con la idea que “la clase política tiene la obligación moral de impulsar una conversación más profunda sobre la identidad nacional. Ese debate debe dar origen a mejores políticas de inclusión” y derrumbar ese “prejuicio antiguo”.