El Gobierno decreta una gran inversión en salarios, jubilaciones e importaciones de energía
De cara a las elecciones, el Ejecutivo tiene decidido recomponer el poder adquisitivo.Uno de los principales problemas que manifiestan los argentinos y las argentinas es que los salarios no alcanzan para cubrir las necesidades y la inflación es la gran preocupación. Por eso, el Gobierno nacional entiende que es momento de recomponer los ingresos de cara a la salida de la crisis económica generada por la pandemia del coronavirus.
En este sentido, el Poder Ejecutivo modificó una vez más el Presupuesto 2021 para ajustarlo a los parámetros actuales, por lo que lo amplió en unos 700.000 millones de pesos en partidas para sueldos y jubilaciones, principalmente.

De esta manera, a través del Decreto de Necesidad y Urgencia 489 publicado en el Boletín Oficial, el presidente Alberto Fernández firmó el documento con el fundamento de que “resulta necesario incrementar los créditos presupuestarios”. En tanto, señaló que será “para incorporar el impacto de las mejoras en las remuneraciones dispuestas por normas legales durante el presente año”.
Por lo tanto, la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES) tendrá más caja para los aumentos establecidos para el 1 de septiembre ya establecidos por la nueva fórmula de movilidad.
Más inversión en otras áreas
Así como la mayor cantidad de dinero estará destinada a salarios, también se dispone una partida para incrementar la importación de gasoil y diesel oil, para la generación eléctrica que aún no es abastecida en el mercado interno.

Asimismo, Aerolíneas Argentinas tomará deuda por 116 millones de dólares para “afrontar gastos de capital y/o refinanciación de deudas existentes” en la línea de bandera. Por su parte, la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales (ARSAT) sumará más fondos.
Por último, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social tendrá más recursos para el Proyecto de Fomento del Empleo para Jóvenes a través de un remanente de un crédito del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF).
Finalmente, esta decisión estuvo avalada por el Ministerio de Economía que conduce Martín Guzmán ya que no pone en riesgo la meta establecida de déficit fiscal de 4,5% del PBI para 2021.