Alberto Fernández en el G7: “No soñamos con un nuevo Plan Marshall”

Al G7 fue donde Alberto Fernández debió acudir. Se trata de un foro intergubernamental de índole política integrado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido; la Unión Europea posee representación política.

Todos los años se realiza una reunión anual en un país diferente, siempre acorde a alguno de sus integrantes. En este caso, sus miembros son países de gran peso político, militar y económico a nivel global. Y allí, el presidente Alberto Fernández esbozó algunas palabras en torno al contexto nacional y la economía regional y nacional.

Declaraciones

Alberto Fernández se refirió a la guerra entre Rusia y Ucrania: “Creemos en la solución pacífica de las controversias y en el pleno respeto de los derechos humanos”. También asumió que desde febrero “reclamamos el cese de las hostilidades”, y afirmó que el único paso necesario ahora es “impulsar el diálogo entre las partes involucradas”.

¿Y qué se puede hacer colectivamente? “Tomemos ya la iniciativa en procura de la paz. Hagámoslo antes de que sea demasiado tarde”. Acompañado del ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Santiago Cafiero, aseveró: “El mundo entero, no exclusivamente Europa, precisa una paz duradera, resistente y sólida”.

Fuente: (Casa Rosada - República Argentina).

El Plan Marshall

Instantáneamente, se trasladó hacia un plano más ubicado en el ámbito económico -también parte del anterior punto- y declaró lo siguiente: “En América Latina y el Caribe no soñamos con un nuevo Plan Marshall. Nunca tuvimos uno, pero soñamos con un nuevo orden internacional donde los esfuerzos se equilibren y las ventajas se distribuyan con criterios de equidad”.

Soñamos con no ser discriminados por el mundo central y condenados a la marginalidad y al olvido.

FMI

El presidente se refirió, además, al acuerdo con el FMI: “La política de sobrecargos cobrados por el FMI debe ser revisada, ya que constituyen una penalización inadmisible en las circunstancias dramáticas que hoy vivimos”. A su vez, reclamó al organismo que “es un auténtico escándalo que no nos perdonarán las futuras generaciones”, aunque no se hayan cumplido los estándares mundiales.

Cerró con la siguiente declaración: “Fue un triunfo diplomático de la Argentina que el FMI no tiene previsto aceptar hasta nuevo aviso”.