Senado paralizado
El Senado nacional está paralizado hace cuatro meses y crecen los reproches cruzados
Tanto el kirchnerismo como la oposición de Juntos por el Cambio se reprochan por la parálisis en la que se encuentra, desde hace cuatro meses, la Cámara Alta. Cristina Kirchner, el eje de la polémica.
Hace cuatro meses el Senado de la Nación se encuentra paralizado y no trata proyectos desde el 16 de noviembre, lo cual provocó un fuerte cruce de acusaciones entre el kirchnerismo y Juntos por el Cambio (JxC). Desde el oficialismo, la senadora Juliana Di Tullio, cercana a Cristina Kirchner, replicó los cuestionamientos y aseguró que “Santa Fe está en estado de emergencia porque la oposición no quiere votar nada”.
La último vez que el Senado nacional realizó una sesión fue el 16 de noviembre, “a pesar de que el Poder Ejecutivo convocó a sesiones extraordinarias” durante todo el mes de febrero. Di Tullio dijo que la Cámara Alta quiso sesionar tanto en diciembre como en febrero para tratar los acuerdos “de jueces y juezas, fiscales y fiscalas de Santa Fe y de todo el país".
La legisladora kirchnerista aseguró que se incluirían iniciativas como la Ley Lucio, la de alcohol cero y el Certificado Único de Discapacidad, pero “la oposición no dio quórum”. “Nosotros no tenemos quórum desde que perdimos las elecciones de medio término en diciembre de 2021”, señaló Di Tullio y remarcó que el Senado hizo un esfuerzo enorme para consensuar las sesiones. Además, explicó que “la vicepresidenta es parte del Ejecutivo y claramente no es quien frena el funcionamiento del cuerpo legislativo”.
Juntos por el Cambio mostró una postura opuesta al destacar que, “a más de tres años de que Cristina Kirchner asumiera su responsabilidad como presidenta del Senado de la Nación”, queda claro que su objetivo “fue utilizar este espacio como medio para instalar y concretar su agenda personal”. Incluso, remarcaron que “es una vil mentira la afirmación del oficialismo: no trabajaron en soledad”, expresaron.
Desde el bloque de JxC aseveraron que reunieron todos los esfuerzos posibles para evitar “la arremetida contra la Justicia” y remarcar la mezquindad del oficialismo que priorizó “la condescendencia con su jefa política antes que el bienestar de los argentinos”, denunciaron los senadores opositores.
