Día del docente universitario argentino: por qué se celebra cada 15 de mayo

Como cada 15 de mayo, este lunes se celebra el Día del Docente Universitario en todo el territorio de la República Argentina. La fecha no sólo recuerda el trabajo de los profesionales dentro de las aulas, sino también su lucha por reivindicaciones relacionadas a su labor de educadores a lo largo de la historia de nuestro país. 

El Día del Docente Universitario es considerado una fecha conmemorativa en el ámbito estudiantil, ya que un 15 de mayo, pero de 1969 tuvo lugar el Correntinazo, una protesta que incluyó manifestaciones y huelgas contra el gobierno militar de facto, que a fines de los años 60 era liderado por Juan Carlos Onganía. Dichos reclamos sucedieron tiempo antes del reconocido Cordobazo.

En los comienzos de la historia, los primeros educadores del ámbito de las universidades fueron sacerdotes de orden jesuita. Luego, lo hicieron los franciscanos, nombrados por un virrey y fieles a la corona de España, que tenían un sistema de educación que consistía en que los alumnos repitan lo que se les enseñaba. No fue hasta la Reforma Universitaria de 1918 que cambió la situación, se establecieron los cargos por concursos, la libertad de cátedra y la posibilidad de que cualquier persona con vocación pueda postularse para ser docente. Hasta llegar al día de hoy, cuando se conmemora una vez más el Día del Docente Universitario.

Qué fue el Correntinazo, el motivo por el cual se conmemora el Día del Docente Universitario 

El Día del Docente Universitario nace después del Correntinazo, cuando el 15 de mayo de 1969, la Federación Universitaria del Nordeste (FUNE) convocó a una marcha al rectorado, en contra del entonces rector, Carlos Walker, que había anunciado la intervención de los centros de estudiantes y un 500% de aumento en los precios del comedor. 

La protesta fue violentamente reprimida y en las inmediaciones de la Plaza Sargento Cabral, un automóvil de la policía abrió fuego directamente contra los estudiantes, lo que provocó la muerte de Juan José Cabral y terminó con varios heridos. Finalmente, las protestas contaron con el apoyo del movimiento sindical encabezado por la CGT, los docentes, los estudiantes secundarios y  lograron que no se privatizara el comedor de la universidad. Esta gesta, que hoy es considerada una efeméride, fue el principio del fin para la dictadura de Juan Carlos Onganía. Una semana después del Correntinazo se llevó a cabo el Rosariazo, y más tarde estos hechos desembocaron en el denominado Cordobazo del 29 de mayo.