Luján
El jefe de Delitos Ambientales de la PFA declaró que autoridades de Luján no controlan el basural
La causa está en manos del juez federal de Mercedes y testificó el comisario inspector Candia.El testimonio de Alberto Raúl Candia se transformó en uno clave para la investigación y es que los dichos corroboran lo denunciado por los vecinos de la zona. En el basural a cielo abierto de Luján, actualmente el más grande del país, se vuelcan residuos patológicos y tóxicos, que contaminan y enferman a las personas, violando la ley de Delitos Ambientales número 24.051.
Candia es licenciado en Química y comisario Inspector de la Policía Federal, quien se encuentra a cargo del Departamento de Delitos Ambientales. Específicamente, fue quien lideró el allanamiento ordenado por la Justicia el 16 de junio pasado. En este momento, la causa se encaminaría a demostrar que las autoridades municipales de Luján, provinciales y de la Nación, habrían permitido que en ese predio de la localidad ubicada en territorio bonaerense se violenten las leyes.

En su declaración, el Comisario de la PFA aseguró que “no hay control de ningún tipo de nada, como ser el ingreso de camiones, etc.” en el vertedero de Luján. El juez Elpidio Portocarrero Tezanos Pinto quiso saber también “si en el ingreso al Basural a Cielo Abierto de Luján hay algún control Municipal” y Candia respondió que “no ha visto controles técnicos algunos, ni de ninguna otra especie”.

Cuáles fueron los resultados del allanamiento de junio en el basural de Luján
El jefe del sector de la Policía Federal ratificó que en el allanamiento que encabezó en junio en el basural de Luján se encontraron “varias bolsas conteniendo restos patológicos, gasas y algodones con sangre, vías de suero, guantes, apósito, jeringas y pañales de adultos”. Además, añadió que estos, de acuerdo a la ley vigente, deben ser esterilizados (por ejemplo, con vapor) y desechados con recaudos especiales.

Los objetos hallados demostrarían no solo que el lugar situado en la provincia gobernada por Axel Kicillof es un foco infeccioso y de contaminación -como denunció la querella- sino también que las familias que viven del basural corren riesgo. Se trata de personas que, sin ninguna protección y en absoluta vulnerabilidad, separan metales, cartones, vidrios y otros elementos.