MAXIMILIANO PULLARO
Maximiliano Pullaro denunció nuevas amenazas en su contra
El mensaje fue encontrado este lunes en el ingreso al edificio del Ministerio de Desarrollo Social.El gobernador de la provincia de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, recibió este lunes nuevas amenazas en su contra que se suman a la serie de advertencias encontradas este fin de semana.
Desde su asunción, el funcionario ha recibido siete amenazas de muerte, cuatro de estas en las últimas 72 horas, por parte de bandas criminales, y pese a ello, Maximiliano Pullaro ha asegurado que no dará marcha atrás en su plan de lucha contra el narcotráfico y la delincuencia.
La advertencia que recibió Maximiliano Pullaro este lunes fue hallada en la puerta de ingreso de la sede local del Ministerio de Desarrollo Social, ubicada en la esquina de Alvear y avenida 27 de febrero, frente al parque Independencia.
De acuerdo con declaraciones oficiales, el mensaje decía: “Pullaro, cuando sigan demoliendo casa y no búnker, vamos a matar a los de la municipalidad. Advertimos pacíficamente”, esto en relación con el derribo de un punto de venta de droga ubicado en Ayacucho 4.300 y otro en Viedma al 200, vinculado con el clan liderado por Alan Funes.
Durante el fin de semana, habían sido reportadas otras tres amenazas contra el gobernador en dos escuelas barriales públicas y en un centro de salud municipal situados en la zona oeste de Rosario. Los mensajes pintados con aerosol decían: "Pullaro narco, con los presos no se jode".
Las autoridades indagan si los mensajes están vinculados o fueron hechos por la misma organización, lo que actualmente es materia de investigación. Las intimidaciones contra el gobernador se dieron luego de que ordenara estrictos controles en las cárceles y más de 50 allanamientos.
En tanto, el Gobierno nacional envió fuerzas federales a Rosario para reforzar los controles de seguridad en las calles y le manifestó todo su apoyo al gobernador contra el crimen organizado.
Cuáles fueron las medidas que implementó el gobernador
Tras su asunción, el gobernador decidió trasladar a los jefes narcos a pabellones de alta seguridad, para impedir que continúen con sus delitos y no gocen de privilegios, pues según el mandatario, "tenían teléfono celulares, Play Station, visitas íntimas todas las semanas y desde los pabellones organizaban el afuera con mucha violencia”.
La orden desató la ola de amenazas en su contra y contra su familia, la cual incluso tuvo que salir de Rosario para garantizar su seguridad. No obstante, el gobernador no ha cedido ante las intimidaciones y asegura que continuará su lucha contra el narcotráfico.