HOSPITAL LAURA BONAPARTE
Trabajadores del Hospital Laura Bonaparte permanecen en el edificio para evitar su cierre
El pasado viernes, el Gobierno anunció la clausura de los servicios de guardia e internación.Luego de que el Gobierno anunciara, el pasado viernes, el cierre del Hospital Laura Bonaparte, trabajadores, pacientes, médicos y ciudadanos en general permanecen en el edificio para evitar su clausura.
A razón de ello, los trabajadores del centro de salud mental realizan este lunes un abrazo simbólico en rechazo al cierre inminente del Hospital Laura Bonaparte. Además, brindarán una rueda de prensa a la 11:00 para dar a conocer cómo seguirá su plan de lucha.
"Vamos a sostener la permanencia en el edificio hasta que nos digan qué van a hacer. Desconocemos cómo va a continuar la situación", subrayó, en diálogo con Clarín, Leonardo Camacho, trabajador social y delegado de ATE del Hospital Laura Bonaparte.
El objetivo de los trabajadores al permanecer en el edificio es evitar que les impidan ingresar a trabajar este lunes, luego de que el Gobierno anunciara la suspensión de los servicios de guardia e internación, pues consideran que es “el paso previo a su disolución definitiva”.
Según denunció ATE, este mismo lunes el Gobierno anunciaría el cierre definitivo del establecimiento, lo que significaría que más de 700 trabajadores quedarán desempleados, y miles de pacientes, desatendidos por la política de ajuste de Javier Milei.
Cabe remarcar que el Bonaparte es el único hospital nacional con especialización de salud mental y adicciones, por lo que su cierre significa también un importante retroceso en materia de atención en en esta materia para toda la comunidad.
Asimismo, el cierre del hospital representa una escalada del conflicto entre el Gobierno y los gremios estatales, quienes desde el inicio de la gestión se han visto gravemente afectados por las políticas libertarias.
Por qué cierran el Bonaparte
El Ministerio de Salud anunció el cierre de la institución bajo el argumento de que “cuenta con muy baja ocupación de solo 30 pacientes y una tasa de internación que oscila entre 16 y 19 personas”, lo que, aseguran, no justifica su permanencia.
Para el Gobierno, los recursos que se destinan a la institución pueden ser utilizados de una mejor forma y en otras áreas y, aunque no detallaron cómo se hará, aseguraron que los pacientes serán trasladados a otras clínicas. Pese a ello, las autoridades del centro de salud afirman que solo este año atendieron hasta 25 mil personas y que el cierre del lugar pone en riesgo su salud y tratamiento.