MARÍA CASH
Caso María Cash: las escuchas telefónicas complican al camionero
La mujer se dirigía de Buenos Aires a Salta y varios testigos aseguran que la vieron mareada y desorientada.El caso de María Cash volvió a estar en boca de todos a partir de la decisión judicial de detener al camionero que la vio por última vez en julio de 2011. En esta oportunidad, mientras intentan develar este misterio de la historia argentina, parece que la trama podría ser mucho más oscura e involucrar a más personas.
Desde que volvieron a aprehender a Héctor Romero, el fiscal que investiga la desaparición de esta diseñadora de moda afirma que la principal hipótesis es que "terminó con su vida y la ocultó". Pero, posiblemente, en medio de esta situación contra María Cash, también haya el delito de encubrimiento por parte de otras personas relacionadas con el entorno del conductor de camiones.
Así lo puede dictaminar la justicia a partir de diferentes escuchas que se registraron en su teléfono celular, el cual podría terminar siendo clave para saber qué es lo que ocurrió aquel 8 de junio de 2011, última vez que se tuvo un registro de esta mujer, quien subió al camión de Romero y no se volvió a saber de ella jamás.
La intervención a los teléfonos de Romero y sus familiares detectaron cómo el hermano del imputado le dice al patrón que "el quilombo está hecho hace 13 años" y que "no sabe cómo zafará". Eso puede ser una prueba más que fehaciente para determinar la culpabilidad de alguien en este caso que todavía no tiene una resolución.
En esta misma línea, el propio patrón de Romero charló, cuando promedió noviembre, con el encargado de una cadena de supermercados y se mostró ofuscado sobre la posibilidad de que haya levantado en su camión a María Cash. Incluso, en un determinado momento, afirma que "el quilombo que hay es muy grande por culpa de un chofer que se ha hecho una cagada".
El recorrido sin final de María Cash
El 4 de julio de 2011, sobre las 20 horas, esta joven de 29 años salió desde Retiro a Jujuy en un micro. Sin embargo, la primera parada la dio el 5 de julio en Tucumán y abordó un nuevo micro hacia Salta. Así llegó a la provincia destino después de hacer diversos viajes a dedo, pero curiosamente volvió a Salta para el jueves 7 de julio.
Ahí varios testigos la encontraron totalmente desorientada y todo derivó en que a las 16 h subió al camión de Romero. Esta persona dice que media hora después la dejó en la gruta de la Difunta Correa, pero el lugar más cercano a dicho sector indica que jamás pasó por allí.