ECONOMÍA
Tras la salida del cepo, cómo fue el impacto en los créditos hipotecarios
Con un tipo de cambio oficial más accesible, la posibilidad de concretar una compra se vuelve más viable.
Los créditos hipotecarios empiezan a mostrar signos de recuperación luego del levantamiento del cepo cambiario anunciado por el Gobierno. Esta decisión removió una de las trabas más importantes para acceder a la vivienda, lo que trajo alivio y nuevas expectativas en el mercado inmobiliario.
Con el regreso de las operaciones con base en el dólar oficial, los créditos hipotecarios en UVA vuelven a tomar protagonismo. Hasta hace poco, quienes accedían a un préstamo de este tipo debían convertir los pesos entregados por el banco al valor del dólar MEP, lo que encarecía la operación. Ahora, con un tipo de cambio oficial más accesible, la posibilidad de concretar una compra se vuelve más viable.
En este nuevo escenario, los especialistas ven con buenos ojos una posible reducción en las distorsiones de precios. La unificación del valor de referencia genera previsibilidad. Aunque se espera una reacción pausada del mercado, ya se percibe un mayor interés en las consultas para acceder a créditos.
“Cuando hablamos de créditos hipotecarios, lo más relevante no es la medida en sí, sino cómo impacta en el poder adquisitivo real de las personas. ¿Qué podemos esperar puntualmente en el corto plazo? Probablemente, en estos días, se generará un clima de precaución, tanto entre quienes están evaluando sacar un crédito como entre quienes quieren vender sus propiedades", afirmó Alan Daitch, CEO de Tasatasa, diálogo con La Nación.
Sin embargo, la inflación, que sigue siendo una variable clave, continúa afectando al índice CER, al que están atadas las cuotas de los créditos UVA. En marzo, por ejemplo, ese ajuste fue del 3,7%. Asimismo, sin una mejora en los ingresos reales, muchos argentinos seguirán viendo a los créditos hipotecarios como algo difícil para acceder.
De esta manera, los créditos hipotecarios tienen condiciones para ser una buena opción, pero dependerá de cómo siga la economía. Si los precios se estabilizan y el poder adquisitivo mejora, muchas familias podrían volver a soñar con la casa propia.
