Caso Cielo López: las razones que condenaron a Alfredo Escobar

Los elementos que llegaron al fallo unánime.
viernes, 13 de noviembre de 2020 · 10:36

Un aire fresco de justicia se respiró en el recinto donde se llevó a cabo el juicio por el caso Cielo López, la joven fallecida el 13/09/2019 en manos de Alfredo Escobar, quien ayer, en un intento desesperado por tapar lo evidente, inculpó a su amigo.

El juicio por jurados fue el número 50 que se realizó en Neuquén desde que se adoptó esta forma de juzgamiento en 2014, y tuvo la particularidad de ser el primero en concretarse en el contexto de pandemia, con un protocolo específico y en la Legislatura de Neuquén.

Culpable. Las pruebas reunidas del teléfono, las pruebas de laboratorio, las imágenes de las cámaras, los 25 testimonios, y las propias palabras contradictorias del imputado, solo lo hundieron más, en cada una de las cuatro audiencias.

Además, el supuesto sindicado por Escobar como responsable, Matías Lozano, nunca estuvo citado en la causa, iba a declarar en calidad de testigo del inculpado y luego no lo convocaron. Posteriormente se enteró de que lo culpabilizó para salvarse. 

Además, nunca se demostró que tuviera relación con el hecho. Declaró a Mejor Informado que no conocía a la víctima, y que tampoco era amigo del presunto autor, solo lo conocía del barrio. Esa noche estuvo con su mujer, un aspecto investigado y corroborado.

Por el contrario, no hubo fisura en la argumentación de los hechos del fiscal jefe Agustín García, que describió paso por paso cómo se manejo el acusado para concretar el aberrante hecho y en su exposición de más de una hora, no quedó ningún cabo suelto.

A las 17 horas y tras una deliberación de más de media hora entre los 12 miembros titulares del tribunal popular, la sentencia fue implacable y se declaró responsable al procesado por el caso Cielo López, por los cargos del Código Penal incisos 7 y 11, 119 tercer párrafo, 45 y 55.

Todos estiman una condena de prisión perpetua. Trascendió que el condenado permanecerá detenido y luego comenzará a purgar la pena. Los amigos y familiares de la muchacha perecida, sintieron que la justicia fue un acto de reparación, ante tanta lucha y dolor. Un veredicto implacable, una sensación de que todo se paga.