Las obras de arte religioso de un zapalino toman trascendencia en Semana Santa

Alberto Painetrú reside en Bariloche.
jueves, 9 de abril de 2020 · 19:34

Alberto Painetrú nació en Zapala  un 13 de enero 1955 y se radicó en San Carlos de Bariloche en el año 1978 en busca de mejores horizontes laborales, comenzando a trabajar como Técnico en el INVAP en el año 1983, donde recientemente se jubiló, luego de una extensa trayectoria en la institución.

Hace muchos años, inspirado en la belleza del lugar en el que vive, comenzó a gestar lo que hoy es su carrera artística, de formación autodidacta, destacando que los elementos que hacen realidad sus obras, son elementos nobles como la madera proveniente de la diversidad de árboles de la zona, maderas secas, pulidas por el agua y hamacadas por el viento; todo esto conjugado con el talento de orfebre y la experiencia para manipular, soldar y pulir metales.

Trabaja el acero inoxidable, acero al carbono y otros metales, tal es así que la pasión con la que trabaja lo ha acompañado durante muchos años en su carrera artística y lo ha llevado a ser un artista reconocido en el ámbito del arte religioso en Argentina y en diversos lugares del mundo.

Los conceptos que nutren sus obras en su mayoría son destacados pasajes bíblicos que selecciona cuidadosamente y que interpreta de una manera única. La proyección artística de Alberto es mucho más amplia debido a que sus obras alcanzan distintos lugares del planeta, gracias a la gran afluencia de turismo provenientes de todos los continentes que arriba a Bariloche.

Una de sus primeras obras grandes fue destinada para la parroquia San Francisco de Asís, en la que fue catequista junto a su esposa Estela durante muchos años. En aquel lugar había una cruz vacía, para la cual fabricó en acero la imagen de Jesús.

En la actualidad, tiene confeccionadas más de 80 obras grandes, pasajes bíblicos en su gran mayoría y cientos de obras de menor tamaño, cada una distinta y única.

Alberto Painetrú continúa con la misma pasión y el respeto como el primer día, creando grandes y pequeñas obras, que presenta cada año en exposiciones, causando gran sensación en el público que las visita.