Fabricaron un respirador con un motor de limpiaparabrisas en Neuquén

Los costos del equipos son mucho menores.
sábado, 30 de mayo de 2020 · 13:00

Dos neuquinos crearon un respirador de emergencia automático con los elementos que encontraron a disposición, para lo cual utilizaron el motor de un limpiaparabrisas, dando lugar a un equipamiento significativamente más económico que los que figuran en el mercado.  

Los dos argentinos que crearon este equipamiento, en el marco de la pandemia de coronavirus, son Gustavo Zaldúa y Dardo Forestier, que luego de más de un mes de trabajo lograron obtener los resultados deseados.

El dispositivo que crearon los neuquinos es un resucitador de emergencia, del tipo que son empleados en las ambulancias con la diferencia que al ponerle un motor y reguladores para el ritmo y volumen de aire, consiguieron que sea un equipo automático en lugar de manual.

“Recibí un video de Barcelona donde enfocaban un ambu o globo manual de los que usan en las ambulancias, que ellos estaban mecanizando en una fábrica de automotores para tenerlo como alternativa, y vi que era algo sencillo que podía hacer acá”, contó Gustavo en declaraciones a LMNeuquen.

Luego de entrar en contacto con Dardo, los dos comenzaron a trabajar en el taller para dar con este respirador y contaron con la asistencia del Gobierno provincial que colaboró para que pudieran acceder a los materiales necesarios ante el cierre de todos lo comercios por la cuarentena.

“Fuimos al hospital y estuvimos mirando cómo funcionaba, hablamos con expertos y tardamos 40 días porque nos costó regular la velocidad, pero después es un motor de limpiaparabrisas como el de cualquier auto”.

Por su parte, Dardo explicó que “la premisa era utilizar elementos asequibles en nuestro mercado y no depender de materiales importados” para reducir las problemáticas que pudieran presentarse al momento de querer proceder a producir el respirador.

En este sentido, el neuquino explicó que el dispositivo que desarrollaron “permitirá elegir con un dial la cantidad de pulsos por minuto y, si bien la idea no es reemplazar el respirador de una terapia, mantiene compensado al paciente y libera las manos al profesional”.