Tras el avance del coronavirus: aumentó la ocupación de camas en Neuquén
Prácticamente se duplicó la cantidad de internados en terapia intensiva.
Desde que el coronavirus llegó a Argentina en el mes de marzo los referentes políticos y las autoridades sanitarias hacen especial hincapié en que el mayor problema que tiene esta pandemia es el colapso sanitario.
La velocidad de contagio con el que el virus se expande es tal que muchas veces los sistemas de salud no dan abasto. Este fue el motivo de la cuarentena temprana en nuestro país. Sin embargo, la disponibilidad de camas sigue siendo una preocupación.
En Neuquén los casos crecieron significativamente las últimas semanas y la ocupación de camas por pacientes con COVID-19 pasó de ser del 20% al 35%.
Actualmente hay 28 personas que ocupan camas de terapia intensiva y un total de 80 internados por esta patología en toda la provincia. Este número, si bien continúa siendo bajo para los 756 casos activos que hay, preocupa por la velocidad en la que aumentó la ocupación.
Esto se debe a que en tan solo unas semanas la cantidad de pacientes activos se elevó y la ocupación de las unidades de cuidados intensivos también. Esto es producto del contagio sostenido de coronavirus que viene registrando Neuquén.
Desde junio, cuando se dispararon los primeros brotes y se detectó la circulación comunitaria en el aglomerado urbano de la ciudad capital, si bien se logró amesetar la curva, los casos positivos continuaron apareciendo y cada vez con más frecuencia. Además se sumaron Cutral Có y Plaza Huincul a las localidades donde hay transmisión local del COVID-19.
En este momento hay un 47% de camas de terapia intensiva siendo utilizadas, de las cuales un 35% es por coronavirus y las demás por otras patologías. Esto demuestra que la mayoría de las personas que requieren de cuidados críticos es por causa de esta enfermedad.
De los 80 internados por coronavirus que tiene la provincia, hay 28 en UTI, 3 en terapia intermedia, 8 están alojados en el Espacio Duam y 43 se encuentran en salas generales. Los restantes 676 están en internación domiciliaria.
