Violencia y oposición ante el avance del proyecto Taxi Rosa en Neuquén Capital

Frente a la iniciativa de un grupo de mujeres que idearon, en Neuquén Capital, un servicio diferencial de atención, con la oferta de taxis con femeninas al volante, la demanda de viajes aumentó, pero con el éxito también llegaron las desventajas.

En este sentido, el grupo de mujeres de la ciudad capitalina fue víctima de situaciones de violencia ya que algunos conductores les tiran el automóvil encima, reciben insultos mientras trabajan y el pasado fin de semana al menos tres perdieron su trabajo por sumarse al servicio de taxi rosa en Neuquén Capital.

De cara a este nuevo servicio, el lunes próximo, la Municipalidad de Neuquén Capital y las organizaciones gremiales de los choferes y licenciatarios expondrán su negativa ante la marcha del servicio, el cual opera en la ciudad por la organización de las mujeres al volante, pero sin una reglamentación vigente.

Dos concejales avalan el proyecto

Por su parte, Cecilia Maletti y Ana Servidio, de los partidos Libres del Sur y del Frente de Todos, buscan unificar dos proyectos antes de que terminen las sesiones, para crear un sistema que permita la continuidad del servicio mientras se revisa la ordenanza de taxis.

“Siempre que se busca la ampliación de derechos y se empiezan a perder privilegios, los sectores conservadores se resisten; esto no es nuevo, hablamos de la violencia de género en ámbitos privados y de conductoras que se agruparon y armaron un Facebook para llevar mujeres por su seguridad”, argumentó Cecilia Maletti.

Además, puntualizó que la violencia e insultos ante una prestación diferenciada “se produjo solo por la iniciativa de querer hacer un registro de 50 conductoras que estarían en condiciones de acceder a licencias: no hay mujeres con licencias, dependen de un hombre que ahora determina si ellas pueden o no pueden trabajar en hacer un taxi rosa o no; y les están sacando los autos. Se quedaron sin trabajo este fin de semana”.

Parece que era un servicio que era requerido ampliamente por la ciudadanía porque están colapsando de pedidos.

Por otro lado, Ana Servidio indicó que solo 200 mujeres de las más de 1.200 licencias de taxis activas están en manos de mujeres. “Esto no va en contra de los hombres ni les saca el trabajo; se trata de muchas conductoras que sufrieron inseguridad por su condición de mujeres y buscan llevar un pasaje de mujeres o personas mayores”, expresó.

“Desde el lado de la comunidad surgió una demanda inesperada, de mujeres o personas que se sienten más seguras viajando con ellas, no es un privilegio; pero les molestó y les sacaron los autos, las dejaron sin trabajo”, finalizó Servidio.