Neuquén Capital
“Turbidez intensa”: a cuántos neuquinos afecta la falta de agua potable
Las tormentas complican la llegada de agua potable a decenas de barrios de Neuquén Capital.
La "turbidez intensa" del río Limay, a pesar de los avances tecnológicos, es todavía un problema para miles de vecinos que reciben en sus hogares un líquido marrón y oliente en vez de agua potable.
Durante esta época, en que las temperaturas y la frecuencia de las tormentas aumentan, es cuando más padecen la falta de agua potable los vecinos de la ciudad capital. En total, se estima que unos 75 mil neuquinos no reciben agua apta para el consumo humano.
Acueducto Mari Menuco
El 10 de marzo de 2010, la inauguración (parcial) del acueducto Mari Menuco abasteció de agua potable al 75 % de los hogares de la capital provincial, por lo que un 25% todavía no recibe ese bien esencial.
La obra fue inaugurada parcialmente porque no se completó: tiene una capacidad proyectada para abastecer a 1 millón de habitantes, pero para ello deben ejecutarse otras dos etapas.
Las dos obras fueron elevadas por el Gobierno provincial en sendos proyectos al Enhosa (Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento) por una inversión total de 5.000 millones de pesos.
Si bien la finalización de las dos etapas solucionaría la turbidez y la falta de agua potable en lo que resta de Neuquén capital, desde el EPAS (Ente Provincial de Agua y Saneamiento) no creen que la Nación haga semejante desembolso.
El problema actual
Las últimas tormentas provocaron la turbidez del río Limay. Antes de que empezara la pandemia, el EPAS suspendía el suministro de agua potable porque los sedimentos no podían ser filtrados y el agua que llegaba a los hogares no era apta para consumo humano.
No obstante, desde que empezó la epidemia, el organismo decidió no suspender el servicio y recomendar a los ciudadanos que no utilizaran el líquido para beber, sino para otras tareas como higiene.
Desde el EPAS, informaron que en las próximas horas la turbidez cederá, pero que eso no implica la recuperación inmediata de agua limpia, ya que probablemente los sedimentos se trasladaron a las cañerías de la red y los tanques de las viviendas.
Con todo, el organismo aseguró que una vez que pase la turbidez comenzará con las tareas de limpieza de las tuberías, que pueden llevar al menos medio día de trabajo.
