Quién es Fabián Ungar, el precandidato a diputado que trabaja de constructor

De cara a las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), el país se prepara para elegir a los precandidatos que competirán en los comicios definitivos. Tan solo uno de todos esos es Fabian Ungar, un neuquino que intentará ganar al interior del Frente de Todos pero que, pese a su actividad política, no renuncia a su trabajo y vocación: el mundo de la construcción.

El precandidato a diputado nacional pertenece a la agrupación “Neuquén de Todos” y es, además, maestro mayor de obras. "Hay semanas que se me hacen largas porque cada mañana me dedico al trabajo en la obra y a partir del mediodía hago campaña”, explica.

En ese sentido, Ungar afirmó, en diálogo con LM Neuquén: “No me quejo porque sé que soy un privilegiado”. “Tengo trabajo, puedo mantener a mi familia y ahora voy por el sueño de ser diputado para representar a todos los neuquinos”, agrega.

Su semana se ve dividida entre la actividad política y aquellas tareas vinculadas a la construcción. No obstante, hay un día en el cual descansa. "Los domingos los aprovecho para estar un rato con los míos y cargar las pilas, y me preparo mentalmente para encarar los lunes, que son los días más largos para los que laburamos en una obra", precisa.

Su vida dio un giro rotundo cuando tomó la determinación de aspirar al Congreso Nacional. Una vez finalizada su jornada en las obras, inicia la actividad de campaña a bordo de su camioneta. "Salió buena mi chata, es un fierro. Le cargo de todo en la caja y se la banca”.

“Como me encanta la ruta, me cuesta largar el volante: la semana pasada viajé a Villa La Angostura y Junín de los Andes, después estuve por San Martín unas horas y me fui para Aluminé antes de pegar la vuelta para Neuquén, y solo dejé de manejar cuando tuve que dar una entrevista para la radio", relata.

La relevancia de las obras

Pese a disfrutar el camino, hubo algo que llamó la atención de Ungar: la falta de obras en la provincia. Según consideró es “una vergüenza que la entrada a esa maravilla que es el sur de la provincia aún sea ese puentecito precario de 2,5 metros", en referencia al puente de La Rinconada.

Otras de sus preocupaciones son aquellos que se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, como por ejemplo “los que por el frío terrible pasan cada invierno sin un techo digno o esos cincuenta mil neuquinos que no tienen gas natural y tienen que pagar la leña como si fuera oro", indica.

“No entiendo cómo Paso por El Chocón no es otro Carlos Paz. Con ese lago, esos cañadones y el tema de los dinosaurios, los yanquis hace rato que hubieran hecho hasta un parque de diversiones a lo Jurassic Park", sentencia.

Según su punto de vista, el aeropuerto de Zapala es una obra desperdiciada. “Está casi abandonado cuando podría ser el gran nodo logístico para las cargas en la provincia, el lugar adonde lleguen los equipos pesados para Vaca Muerta y desde donde los neuquinos podamos exportar a los países del Pacífico", manifiesta.

“No me va mal como constructor, pero volví a la política activa porque me cansé de ver que los políticos de la provincia están lejos de la gente, saltando de un cargo a otro sin salir de su zona de confort, sin pensar jamás en un proyecto para que en Neuquén todos podamos vivir mejor, porque esta es una provincia rica pero mal gestionada”, opina. Y concluye Ungar: “No puede ser que se batan récords de producción de petróleo y esa plata no sirva para construir viviendas o generar trabajo genuino".