Neuquén
La Laguna Tromen se secó y mucha de su fauna y vegetación se perdió
En diez años, la superficie de la Laguna Tromen se redujo en más del 99 %.El cambio climático provocó la triste sequía de la Laguna Tromen y el Bañado Los Barros, sitios ubicados en el norte neuquino en el área protegida provincial de El Tromen.
La zona se encuentra seca y está lejos de tener la gran cantidad de fauna y vegetación que antes poseía. En la Laguna Tromen abundaba una gran cantidad de aves acuáticas y migratorias, que si bien hoy hay, son muchas menos y permanecen por menos tiempo.
La directora provincial de las ANP (Áreas Naturales Protegidas), Lucia Redondo, informó que la Laguna Tromen abarcaba una superficie aproximada de 470 hectáreas en 2012 y hoy está reducida a sólo tres hectáreas.
A su vez, la también directora de Recursos Faunísticos de Neuquén sostuvo que lo más preocupante no solo es la cuestión de las aves, ya que “hay algunas que incluso cruzan todo el continente para llegar a este lugar”, si no que también hay que tener en cuenta que el Parque Provincial Tromen es un sitio Ramsar, es decir, que integra la Lista de Humedales de Importancia Internacional.
“Es un hábitat de aves acuáticas. Es preocupante porque los servicios ecosistémicos que brindan los humedales son importantísimos, entre ellos que son un reservorio de carbono. Por lo que sí los humedales bajan, hay menos captación de carbono, por lo tanto vas a tener más emisión, y si tenés más emisión, vas a acelerar el proceso de degradación”, señaló.
Consecuencias de la sequía en la Laguna Tromen
En diálogo con el diario Río Negro, Jorge Gómez, guardaparque del lugar desde hace 16 años sostuvo que entre las consecuencias que ocasionó el panorama de sequía es que cuando empezó a bajar el agua y ampliarse las costas, comenzó a dejar al descubierto los sitios de nidificación e hizo que entrarán los animales de ganado y empezaron a comerse los nidos y la vegetación.
“Había más de 37 especies de aves acuáticas y la mayoría nidifican en ese lugar. Teníamos una población de 5-6 mil cisnes de cuello negro en la Laguna Tromen y en Bañado los Barros. También cauquenes, aves rapaces, gallaretas, patos, entre otras”, indicó.
En tanto, recalcó que mucha de la fauna que había en la Laguna Tromen ya se ha ido y solo quedan algunas aves playeras que vienen del sur de Canadá. “Pero a medida que se van secando los cursos de agua, se van. Ahora en febrero, va a ser tipo desierto y prácticamente no va a haber ningún ave”, declaró Gómez.