ALUMINÉ
La lluvia no fue suficiente para acabar con los incendios de Aluminé
El Municipio de Aluminé dispondrá de más brigadistas para intentar sofocar el fuego.
Llovió y nevó en casi todas partes excepto en Aluminé, donde más se necesitaba agua. El frente frío proveniente del Océano Pacífico trajo alivio a la cordillera, sobre todo para quienes siguen con los trabajos en el combate de incendios.
Sin embargo, en las regiones más cálidas, que fueron arrasadas por un incendio hace unas semanas (Aluminé), el agua casi no llegó. Por eso se encuentran brasas y rescoldos en la zona de las araucarias, bajo la vigilancia de los brigadistas que trabajan en la localidad de la provincia de Neuquén.
"En la actualidad entre 15 y 20 personas siguen recorriendo las zonas calientes tratando de terminar de apagar las brasas, ante el inminente regreso del calor y las altas temperaturas. Los brigadistas pertenecen a Corfone, Parque Nacional Lanín y la brigada de Aluminé”, declaró John Cuiñas (responsable del Plan Provincial de Manejo del Fuego).
El funcionario agregó sobre lo que ocurre en la ciudad patagónica: “El incendio está controlado, pero no está apagado. La zona de los implantados y los ñires se apagó, pero el sector de las araucarias sigue muy caliente. Si vos tiras un clavo (zona entre el tronco y la rama de la araucaria) en una estufa, al otro día seguirá ardiendo”.
“Estamos muy cansados, pero no queremos aflojar. Sabemos que si seguimos como venimos trabajando hasta el momento, vamos a terminar antes de lo esperado. Sabemos que, para futuros incendios, ojalá no hayan más, tenemos idea de qué hacer”, sumó.
El pedido de Cuiñas
“Si bien la sequía fue un factor determinante para los incendios de este verano, también tienen que colaborar la gente que circula por los bosques cordilleranos; si ellos nos ayudan, todo va a terminar mucho más rápido, por eso se lo pedimos de corazón”, señaló John Cuiñas sobre los incendios en Aluminé.
Por último, añadió para finalizar su discurso: “A veces no es necesario prohibir, sino que los turistas tomen conciencia del peligro que hay cuando se enciende un fuego en lugares no habilitados”.
