Aluminé

La lluvia no llegó al foco del incendio en Aluminé y se complican las tareas de contención

Así lo confirmó el director general del Plan Provincial del Manejo del Fuego, John Cuiñas, quien se encuentra en Aluminé.
miércoles, 19 de enero de 2022 · 10:41

En los últimos días el frente frío proveniente del Océano Pacífico trajo alivio a la zona de la cordillera, sin embargo, la lluvia no llegó al foco del incendio en Aluminé y en el lugar aún trabajan brigadistas para contener el fuego y realizar guardias de cenizas.

De esta manera, las brasas que podían ser apaciguadas por las lluvias en la localidad neuquina de Aluminé siguen activas en la zona de las araucarias y son los brigadistas quienes vigilan que las mismas no se reactiven, ya que el incendio está controlado, pero hay áreas que continúan activas.

Hasta el momento el incendio consumió 8 mil hectáreas en la zona.

“Lamentablemente, la lluvia al lugar del incendio no llegó”, confirmó el representante del Plan Provincial del Manejo del Fuego, John Cuiñas, y agregó que el agua llegó a unos 17 kilómetros de donde se encuentra el foco ígneo en Aluminé.

Además, indicó que el fuego tomó campos privados y que el lugar es “muy, muy grande” y es por ello que “es tan difícil la guardia de cenizas, por las dimensiones que tiene”. También explicó que en el lugar hay araucarias que complican las tareas de contención por sus características.

En tanto, remarcó que las tareas que se llevan a cabo en la región son las guardias de cenizas “que consisten en recorrer el incendio, en recorrer todo el perímetro revisando que no haya puntos calientes, sobre todo en la zona de araucarias”, que pueden prender por debajo de la tierra.

 

Cómo es el trabajo de contención

Consultado por las tareas de vigilancia en el incendio forestal de Aluminé, Cuiñas explicó que se abre el terreno donde se encuentra un punto caliente y se escarba para arrojar agua y así apagar el fuego con el objetivo de que no prenda nuevamente.

Asimismo, indicó que no se debe tapar con tierra ya que “el suelo es mineral y levanta temperatura, lo puede apagar un rato, pero en uno o dos días es probable que el viento lo destape y prenda”.

Por último, expresó: “Hoy pusimos más gente, siempre dejábamos una cuadrilla en Aluminé y va la otra, hoy pusimos todo a ver si le podemos dar un tanque más grande y así ya lo podemos empezar a liquidar porque la gente ya está muy cansada”, ya que desde el 17 de diciembre se combate el incendio.