Guillermo Pereyra: “Se nos está sumando mucha gente que estaba con Rolo”

El exsenador Guillermo Pereyra reiteró sus críticas hacia Rolando Figueroa por su decisión de no participar en las elecciones internas del Movimiento Popular Neuquino (MPN) y lanzar su candidatura a gobernador por fuera del partido provincial, a solo tres días de que finalice el plazo para inscribir listas.

“Ir por fuera es olvidar todo lo que se hizo, para ir a formar otro partido, a aliarse con otro partido nacional”, reprochó el referente de la línea Azul y Blanca, quien aseguró que, como consecuencia del descontento, “se nos está sumando mucha gente que estaba con Rolo”.

En diálogo con Radio Nacional, Pereyra sostuvo que “el Movimiento Popular Neuquino es la historia viva de la provincia. Nacimos a cuatro años de haber pasado de ser territorio nacional a provincia”. El dirigente petrolero reivindicó el legado de los fundadores del partido, entre ellos Teolinda Barrera, Nélida Álvarez del Pin, Amado y Felipe Sapag, “aquellos históricos que conformaron el MPN para dar paso a una serie de transformaciones”.

Y agregó: “Siempre hablaba Felipe (Sapag) de los ranchos que había que erradicar, que no había caminos, no había puentes, no había comunicaciones, y hoy Neuquén se ha transformado en una de las provincias más importantes de la Argentina”.

Pereyra destacó la creación del Consejo de Planificación y Acción para el Desarrollo (Copade), “que proyectó una provincia a 25 años y hoy tenemos nada más que pararnos en las bardas o en Plaza de las Banderas para ver la ciudad de Neuquén, el crecimiento que tiene”. Y remarcó: “Esto es obra del Movimiento Popular Neuquino”.

Insistió en que Figueroa se aprovechó del MPN para llegar a la intendencia de Chos Malal y ser diputado provincial, vicegobernador y diputado nacional. “El que quiere salir de esta historia, de la que formaron parte durante muchos años él y su familia, realmente no nos interesa. Seguimos adelante nosotros con este crecimiento sostenido, con nuestras riquezas, con Vaca Muerta, que está en su pleno apogeo. No podemos detenernos a pensar en lo que hace el otro”.