POLICIALES
Delincuentes golpearon y maniataron a dos mujeres y les robaron dólares y joyas
Las personas revolvieron la casa y consiguieron recaudar 3 mil dólares, objetos de oro y de colección. Sucedió en un barrio del alto de San Martín de los Andes.Tres delincuentes con el rostro cubierto irrumpieron en una casa de San Martín de los Andes, donde maniataron, amordazaron y golpearon a dos mujeres para robarles. Los ladrones escaparon con un cuantioso botín y la causa ya quedó en manos de la Justicia.
El agresivo robo sucedió el sábado por la noche, en una vivienda del barrio Alihuen Alto, de la localidad del sur de la provincia, cuando una banda de delincuentes ingresó por la fuerza y por medio de la violencia, lograron reducirlas.
Pese a que las víctimas intentaron resistirse, fueron maniatadas y golpeadas por los delincuentes, quienes exigían que entregaran sus objetos de valor. Ante el intento de las mujeres de pedir ayuda por medio de gritos, las amordazaron.
No obstante, ante la falta de respuesta de las propietarias, los malvivientes revolvieron toda la casa para encontrar por sus propios medios los objetos de valor que habían ido a buscar.
Luego de un minucioso saqueo, que duró unas dos horas, los ladrones consiguieron juntar alrededor de 3 mil dólares, así como joyas de oro y una colección de cuchillos artesanales. Acto seguido, ingresaron a las víctimas, atadas y encerradas con llave, en una de las habitaciones mientras ellos escapaban.
Un trabajador, pieza fundamental para rescatarlas
Las mujeres fueron encontradas horas después, cuando llegó el casero a trabajar. Una vez liberadas por el trabajador, dieron inmediato aviso de lo sucedido a la Comisaría 43. Dadas las circunstancias, los uniformados se hicieron presentes en el lugar para realizar las primeras observaciones y dar con cualquier tipo de prueba que sea de interés para la investigación que realizan la Policía y Justicia.
Según informaron las mujeres, uno de los delincuentes era alto y robusto, además, especificaron que era quien manejaba la situación e indicaba a sus compañeros cómo proceder. En tanto, los otros sujetos usaban ropas oscuras y borcegos marrones. Estos fueron los únicos datos que pudieron aportar, ya que los atacantes en todo momento tuvieron los rostros cubiertos.