Crece la bronca de los vecinos del barrio Sapere por falta de agua

Vecinos del barrio Sapere se movilizaron hacia el ingreso a Neuquén capital, en calle Alderete y ruta, donde realizaron una volanteada con la que exigieron una respuesta inmediata al Gobierno provincial y a la Municipalidad, porque llevan más de dos meses sin agua en el sector.

Desde la Corriente Clasista y Combativa, Marisol Quinchagual le manifestó a Minuto Neuquén que en el barrio Sapere “no se está garantizando el agua para los vecinos y vecinas ni tampoco para los comedores y merenderos” y acotó que por las “fallas graves en el servicio, no pueden brindar las viandas cotidianas que reciben quienes no pueden garantizarlas en sus mesas, debido al desempleo, sueldos precarios y changas insuficientes”.

A la altura del acceso al barrio Sapere, desde las 10 horas de este viernes, los habitantes decidieron hacer público el reclamo. “Entendemos que tenemos que buscar en lo colectivo el apoyo de la sociedad para que el Gobierno tome las cartas en el asunto y resuelva el problema ante las altas temperaturas”, dijo Quinchagual.

'Tenemos la urgencia de que se resuelva', dijo Marisol Quinchagual de la Corriente Clasista y Combativa.

La dirigente afirmó que la ausencia del agua agrava los padecimientos de los sectores más vulnerados. “Por ejemplo, vienen a retirar las viandas y ya no las podemos garantizar”, lamentó y explicó que ofrecen alimentos a los más desprotegidos del Estado, “donde no hay trabajo, las viviendas son demasiado precarias y no tienen comida en la mesa, entonces nosotros, los comedores comunitarios, les garantizamos un alimento, una merienda, una vianda”.

Los representantes de la Corriente Clasista y Combativa, a través de un comunicado, expresaron que “el agua es un derecho vital y ante altas temperaturas, que cada día se vuelven peor, el alimento que repartimos en lo cotidiano no se puede garantizar, así como tampoco la higiene y el no exponernos a condiciones insalubres” y además subrayaron: “La situación de emergencia se agudiza más aún”.

Ni una gota agua de las canillas

Marisol Quinchagual detalló que, hace un mes aproximadamente, los operarios del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) le dijeron que el problema era un ducto que estaba roto en las cercanías del barrio. “Desde luego, después de esa respuesta tuvimos agua por un día y nunca más se retomó con normalidad el servicio” y precisó que “hay días enteros que no sale una gota de agua de las canillas, pero que tampoco nos ofrecieron una alternativa mientras se resuelve el problema”.

“No puede ser que ante la falta de agua también seamos las organizaciones sociales y los espacios comunitarios del barrio quienes garanticemos el servicio. Debe ser el Gobierno provincial y el Gobierno municipal los que garanticen el agua en nuestros hogares y en nuestros comedores y espacios comunitarios, no al revés”, concluyó la dirigente social.