La mujer calcinada en Piedra del Águila tenía clavado un cuchillo en el pecho y 19 puñaladas

El resultado de la autopsia de las dos personas que hallaron calcinadas en una vivienda, que se incendió en el centro de Piedra del Águila, llevó a que la Fiscalía dirija su investigación hacia un posible femicidio seguido de un suicidio.

Los primeros indicios que señalaron oficiales de la Policía y el cuerpo de Bomberos Voluntarios, que intervinieron en el siniestro, daban cuenta de que ambos cadáveres tenían aparentes signos de violencia. El estudio forense reveló que la mujer tenía un cuchillo clavado en el pecho y el varón recibió un disparo en la cabeza.

Los cuerpos corresponden a Carolina Epullán y Víctor Iván Aravena, quienes fueron encontrados sobre la cama, lugar donde las primeras pericias sostenían que allí se habría iniciado el incendio. La Fiscalía intenta determinar si el origen del incendio fue intencional.

El fiscal Manuel González, a cargo de la investigación, confirmó que el informe preliminar de la autopsia reveló que la mujer tenía 19 puñaladas y que las quemaduras se produjeron cuando ya estaba muerta. Una de esas lesiones provocadas por un arma blanca sobre el corazón le ocasionó la muerte. Epullán, de 25 años de edad, y Aravena, de 27, eran pareja y residían en la localidad de Piedra del Águila.

La hipótesis del Ministerio Público Fiscal apunta a determinar si el autor del femicidio fue Aravena, quien después de cometer el crimen se habría quitado la vida.

Hasta el momento, los hechos fueron el pasado sábado, 20 de mayo, a las 23:10 horas. Un llamado telefónico encendió las alarmas por un incendio en una vivienda de Piedra del Águila. Cuando los brigadistas pudieron sofocar las llamas, dieron con los cadáveres postrados sobre la cama de la habitación. Todavía se aguarda el resultado de la autopsia de Aravena.

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