Escuela 175: otro trabajador sufrió una descarga eléctrica y van dos en la semana

La comunidad educativa de la Escuela 175, donde también funciona el CPEM 88, denunció que un trabajador sufrió una descarga eléctrica este miércoles, que se suma a la recibida por una docente el pasado lunes, la que motivó la suspensión de las clases hasta tanto no se garanticen condiciones de seguridad para el normal funcionamiento de la institución.

A través de un comunicado, explicaron que para abordar la situación, el miércoles se realizó una reunión en el Consejo Provincial de Educación a la que asistieron el director de Mantenimiento, Luciano Saborido, y la responsable de Seguridad e Higiene, Macarena Rivera, pero no la directora de Nivel Primario, Patricia Cresatti, ni la de Nivel Medio, Graciela Gracia, responsables respectivamente de la Escuela 175 y el CPEM 88.

“El director de Mantenimiento y la responsable de Seguridad e Higiene afirmaron que la escuela es ‘segura y funcional’ y que por eso ‘saltó la térmica’ y que por lo tanto no hay problemas, pero que aun así, ante los reclamos de las familias, se comprometieron a aplicar la circular 04, convocando a un auditor externo al CPE”, contaron.

Luego habría arribado a la institución personal de mantenimiento tercerizado para hacer reparaciones que estaban pedidas con anterioridad, pero la directora les negó el acceso porque Saborido había ordenado que no se realizara ninguna tarea de mantenimiento hasta tanto se concretara una auditoría. Pocos minutos después, el mismo Saborido llamó a la directora y le solicitó que dejara entrar a los trabajadores.

Fue entonces cuando se produjo una nueva baja de tensión y, según el comunicado, “cuando asisten a ver a qué se debía, descubren que uno de los trabajadores había sufrido una descarga eléctrica, ante lo cual la directora se comunicó con la ART y llamó a la ambulancia y al jefe de Mantenimiento”. Posteriormente, habría aparecido en la escuela una persona que se identificó como dueña de la empresa de mantenimiento y se llevó a los trabajadores, antes de que llegara la ambulancia.

Desde la comunidad educativa critican que, tras hacerse público el hecho, Saborido negó las descargas eléctricas ante los medios de comunicación. “Cada vez que las denuncias sobre el desastre edilicio se hacen públicas, intentan arreglar rápidamente y de manera superficial para simular que el estado denunciado no es tal”, plantearon.

A su vez, cuestionaron la tercerización y precarización del trabajo de mantenimiento, pues “tiene consecuencias nefastas para las escuelas, la comunidad educativa y los trabajadores que realizan esas tareas sin condiciones laborales mínimas”.

Respuesta oficial

Desde el área de Mantenimiento Escolar Confluencia del CPE aseguraron que “el operario que intervino en la Escuela 175, al cambiar una lámpara por manipulación inapropiada, tuvo una descarga menor, lo que en muchos casos es habitual para quienes desarrollan ese tipo de actividad”.

Y agregan: “No tuvo ninguna consecuencia en su salud y mañana trabajará normalmente. Se realiza la presente aclaración debido a versiones que circulan sobre supuestas consecuencias que no son tales”.