SALUD
Parto domiciliario: "La denuncia despierta una gran necesidad de aleccionar y adoctrinar"
Integrantes de la Asociación Argentina de Parteras Independientes reivindicaron el derecho de la mujer a parir en el hogar y reafirmaron que el ejercicio profesional es legal.Luego de la denuncia que dio a conocer la dirección del Hospital Regional Castro Rendón contra una obstetra de la provincia de Neuquén que acompañó un parto domiciliario, la Asociación Argentina de Parteras Independientes se pronunció a través de un comunicado para repudiar “las falsas divulgaciones e infundadas acusaciones” y contra todo acto que “atente sobre el libre y adecuado ejercicio de la profesión”.
Minuto Neuquén dialogó con Carla Veleda, partera independiente, integrante de la asociación, perito auxiliar de justicia y docente, quien abordó los principales pilares del parto domiciliario planificado. A la vez, habló sobre la necesidad que tiene el sistema de salud de adoctrinar y aleccionar no solo a los y las profesionales autónomos, sino también a las familias que eligen parir en casa.
“El punto flojo en nuestro país es la articulación con el sistema de salud. La salud pública está para garantizar la atención, pero muchas mujeres que vienen de un parto planificado en el hogar terminan muchas veces denunciadas, criminalizadas o lo hacen contra la profesional que acompañó”, indicó Veleda.
Asimismo, explicó que si bien cada provincia adhiere a las normativas de manera diferente, en Neuquén, no hay nada que prohíba a una partera asistir un nacimiento dentro del hogar. Hizo hincapié en la Ley Nacional 17.132 y detalló: “Dice que las parteras pueden asistir dentro del domicilio de la paciente. El ejercicio profesional es legal, que se lo intente poner en otra cuadratura es para amedrentar a los profesionales o las familias”.
En cuanto a la denuncia que fue realizada en Fiscalía, Veleda sostuvo que se trata de un adoctrinamiento a las “pocas profesionales que vienen resistiendo estos arrebatos de la autonomía profesional” y al pensamiento crítico de una comunidad. “Quien hizo la denuncia se encarga de que los medios tomen el tema y asienten posturas”, estableció.
Es correcto hacer un traslado ante una situación del desvío de la salud, es un buen hacer. Si no fuese correcto, no le estaría dando la posibilidad a esa mujer y a ese bebé de recibir una atención adecuada.
Al mismo tiempo, habló de tres pilares fundamentales sobre la planificación de un parto domiciliario. El primero es el seguimiento durante la gestación de la mujer, para asegurarse de que sea saludable. El segundo pilar implica una complejidad de nivel uno, la prioridad de la atención del parto en casa es hacer el seguimiento de la fisiología, no hay intervenciones medicamentosas que, según la profesional, disminuye al mínimo la posibilidad de que los partos se compliquen.
En ese sentido, Veleda puntualizó: “El principal factor que hay, de que los partos puedan complicarse, tiene que ver con las intervenciones innecesarias, con la falta de movimiento de las mujeres en el trabajo de parto, con la falta de información y eso está dado desde la fisiología, en lo que es la atención del parto, la evidencia científica dice que no puede haber intervenciones farmacológicas en un nacimiento en casa”.
“Si algo se desvía de lo saludable, que puede pasar porque la seguridad absoluta no existe ni en las instituciones ni en un parto en casa, entonces ahí entra en escena el entrenamiento y el equipamiento de las parteras para poder hacer un traslado oportuno a una institución de mayor complejidad”, continuó. Eso contempla el tercer pilar, llamado “Plan B”, en donde se prevé que la institución donde va a ser traslada la mujer ante alguna complicación no esté a más de 40 minutos del domicilio y sea de alta complejidad. “Cuando estas tres patas se dan firmemente, sería igual de seguro para una mujer saludable que parir en una institución”, indicó.
Los motivos por los cuales las familias se deciden por el parto en casa
Veleda relató que un porcentaje de las familias que se deciden por parir fuera de una institución se debe a que ya pasó por un parto en una y fue vulnerada en sus derechos y en los de los bebés. Más allá de estas experiencias, hay quienes lo eligen entendiendo que es un evento de la vida sexual de las mujeres y, también, fisiológico, que no es de índole médica, que no necesita la alta tecnología. “Hay una concepción de lo que es el evento del nacimiento desde una mirada no hegemónica, como lo hace la medicina, que piensa todo el tiempo en controlar un proceso que puede complicarse”, manifestó.
Este derecho a elegir, desde la Asociación de Parteras Independientes, lo encuadran dentro de lo que es la Ley 25.929. En el artículo 2 de la normativa establece, entre otros derechos, que toda mujer en relación con el embarazo, el trabajo de parto, el parto y el postparto, debe ser informada sobre las distintas intervenciones médicas que pudieren tener lugar durante esos procesos, de manera que pueda optar libremente cuando existieren diferentes alternativas. También, tiene derecho al parto natural, respetuoso de los tiempos biológico y psicológico, evitando prácticas invasivas y suministro de medicación que no estén justificados por el estado de salud de la parturienta o de la persona por nacer. Y debe estar acompañada por una persona de su confianza y elección durante el trabajo de parto, parto y postparto.