Murió Rubén Carolini, el hombre que descubrió el dinosaurio carnívoro más grande del mundo

El 25 de julio de 1993, el mundo asistía al descubrimiento paleontológico más importante de la historia: Rubén Carolini halló los restos del dinosaurio carnívoro más grande del planeta. Desde ese instante, los paleontólogos Leonardo Salgado, Rodolfo Coria y Jorge Carvo formarían un equipo de rescate que logró recuperar cerca del 70 % de la estructura ósea del fósil gigante.

Rubén Darío Carolini había nacido 49 años antes, en la localidad de Oncativo, provincia de Córdoba, donde vivió hasta los 11 años y concurrió a la escuela hasta quinto grado, cuando tuvo que abandonar por problemas económicos de su familia, se lee en su biografía. Su padre le enseñó el oficio de mecánico, al que se dedicó por varios años.

A los 23 años, en 1967 llegó a Cipolletti y tres años más tarde contrajo matrimonio con Graciela Belleggia y tuvieron dos hijas. Entre los años 1969 y 1974, se desempeñó como jefe de mantenimiento de los grandes camiones en la represa el Chocón y luego trabajó en Hidronor, hasta la privatización de la compañía, en 1993. Carolini descubrió su pasión por la búsqueda de fósiles, en 1988 y cinco años más tarde, llegaría el hallazgo que puso a Neuquén en las primeras planas de las publicaciones de divulgación científica del mundo.

En 1995, la revista científica Nature fue la primera en divulgar el hallazgo del “Gigantosaurus Carolinii”, el mayor dinosaurio carnívoro descubierto y reconociéndolo aún mayor que el famoso Tyranosaurus Rex. En ese mismo año, se produce la municipalización del Museo Paleontológico de El Chocón, donde fue nombrado director.

El hallazgo realizado por Carolini y su equipo paleontológico le dio un fuerte impulso a la actividad científica en la provincia, la cual contribuyó, junto a los museos, al desarrollo del perfil turístico en el ámbito nacional e internacional. Además, puso a la región en los primeros lugares del mundo en riqueza paleontológica.