NEUQUEN

Condenaron a 2 años de prisión a un hombre que disparó a tres personas en el barrio Z1

Jesús Adrián Álvarez tiene condenas anteriores por robo, hurto y encubrimiento.
miércoles, 16 de octubre de 2024 · 21:20

Un hombre que tiene en su haber condenas por robo y encubrimiento fue sentenciado a 2 años de prisión efectiva por haber efectuado disparos con un arma de grueso calibre contra tres personas –una de ellas es adolescente-, en febrero de este año en el barrio Z1 de Neuquén. No logró lesionarlas, pero sí causó daños en una vivienda y un comercio vecino.

Jesús Andrés Álvarez reconoció la autoría de los disparos en una audiencia presidida por la jueza Natalia Pelosso. Su defensa llegó a un acuerdo con la fiscal Lucrecia Sola y aceptó la pena que se le impuso por el delito de abuso de arma agravado por la participación de un menor de edad, que en la escala penal va de 1 año y 4 meses a 4 años de prisión.

La fiscal Lucrecia Sola y la asistente Guadalupe Inaudi. Fuente (MPF)

El 8 de febrero de este año, cerca de las diez de la noche, acompañado por un menor de 15 años, Jesús Andrés Álvarez efectuó al menos tres disparos de arma de fuego contra tres víctimas, una de ellas es también menor de 18 años, quienes se encontraban en la parte externa de una vivienda del barrio Z1 de Neuquén capital. Dos de las balas, calibre 9 milímetros, impactaron en el frente del domicilio, mientras que el tercer proyectil cayó en un comercio lindante, sin llegar a lesionar a persona alguna.

Por ese hecho, el 28 de agosto se dictó la sentencia de responsabilidad y se lo condenó por el delito de abuso de arma agravado por la participación de un menor.

Comisaría 18 del barrio Gran Neuquén. Fuente (X)

Para arribar a los dos años de pena que se acordaron durante la audiencia del pasado martes, Sola explicó que se buscó la proporcionalidad respecto del daño causado y se consideró que el ahora condenado tenía antecedentes por los delitos de robo con arma, hurto y encubrimiento, y que más allá de que cumplió esas condenas, tiene conocimiento de las consecuencias de cometer delitos.

El único atenuante que se tuvo en cuenta a su favor fue el haber reconocido los hechos, mientras que, como agravantes para ir más allá del mínimo de la pena, se ponderaron la “peligrosidad causada” y la “naturaleza de la acción”. “Fue un hecho muy violento que denotó un desprecio por la vida ajena, en un barrio y con vecinos”, precisó la fiscal del caso.