VILLA LA ANGOSTURA
Acusaron por "turbación" a miembros de una comunidad mapuche del cerro Belvedere
Se trata de integrantes de la comunidad Paicil Antriao, que mantiene un conflicto con la familia Salamida por la propiedad de tierras.La fiscalía de Villa La Angostura acusó a dos integrantes de la comunidad mapuche Paicil Antriao, por el presunto delito de “turbación”, al sostener que restringieron el derecho de posesión de un predio donde, quienes aseguran ser sus propietarios, instalarán un centro de equinoterapia en el cerro Belvedere.
Adrián de Lillo acusó a los miembros de la comunidad mapuche PaicilAntriao, Jovita Dora Calfupan y Damián Andrés Olivera de llevar adelante una violenta irrupción, junto a otras personas, la tarde del 3 de febrero en las 3 hectáreas en conflicto, mientras profesionales realizaban un relevamiento y la colocación de estacas y cintas demarcadoras. Además, a Olivera se le imputó el delito de tentativa de robo del teléfono celular de una persona que se encontraba filmando los sucesos.
Los hechos que describió el fiscal en la audiencia de formulación de cargos, que se concretó a sala llena, ocurrieron el 3 de febrero pasado, alrededor de las cinco de la tarde. Allí, un grupo de profesionales se encontraba en el lugar por encargo de los propietarios del lugar —las hermanas Josefina y Raquel Salamida— para realizar tareas de “replanteo” de cara a la construcción de un centro de educación ecuestre terapéutico.
De Lillo precisó que, mientras colocaban estacas y cintas demarcatorias, se acercó un grupo de mujeres y varones integrantes de una comunidad mapuche. En particular, se identificó a Jovita Calfupan y a Damián Olivera, quienes comenzaron a ejecutar actos intimidatorios, para luego retirar las estacas y cintas. De esta forma —sostuvo el fiscal del caso— y mediante los actos de turbación, los acusados restringieron el ejercicio del derecho de posesión del inmueble de los propietarios, lo que motivó además que el grupo se retirase del lugar.
Por otra parte, el representante del Ministerio Público Fiscal le atribuyó a Olivera haber intentado sustraer el celular con el que uno de los profesionales filmó lo ocurrido, no pudiendo concretarlo debido a que la víctima forcejeó y logró recuperar el dispositivo.
De Lillo formuló la acusación como delito de turbación, en calidad de coautores, en concurso real con robo, en grado de tentativa y en calidad de autor respecto de Olivera. Para desarrollar la investigación, De Lillo solicitó tres meses de plazo. El juez de Garantías, Maximiliano Bagnat dio curso a la acusación tal como la planteó la fiscalía.