INDUSTRIA
La PIAP logró una prórroga de seis meses mientras negocia acuerdos de venta de agua pesada
Rubén Etcheverry confirmó la prórroga del contrato de conservación y detalló avances en acuerdos comerciales.
La reactivación de la Planta Industrial de Agua Pesada (PIAP), ubicada en Arroyito, sumó un paso importante esta semana con la prórroga del contrato de conservación por seis meses más. Esta medida permitirá sostener las condiciones operativas de la planta, que permanece paralizada desde hace siete años, y avanzar en gestiones para su reapertura.
El acuerdo, firmado entre los accionistas de la Empresa Neuquina de Servicios de Ingeniería (ENSI) y la Comisión Nacional de Energía Atómica, dueña del activo, busca garantizar que el equipamiento no se deteriore y conservar el conocimiento técnico necesario. La iniciativa cuenta con el respaldo del gobernador Rolando Figueroa y es encabezada por el ministro de Planificación, Rubén Etcheverry.
Durante los últimos días, la Planta Industrial de Agua Pesada recibió la visita de directivos de Cambridge Isotope Laboratories (CIL), quienes recorrieron las instalaciones y evaluaron el estado general de la planta. Etcheverry explicó que la delegación quedó sorprendida por el nivel de mantenimiento y confirmó que se avanzó en un borrador de acuerdo para la provisión de agua pesada.
Entre los puntos destacados, se planteó inicialmente un volumen de compra de 80 toneladas anuales durante cinco años, aunque CIL abrió la posibilidad de duplicar esa demanda en función de las necesidades futuras. Los representantes de la empresa remarcaron la alta calidad del producto fabricado en la PIAP, especialmente en términos de pureza y concentración isotópica.
Etcheverry también indicó que, más allá de la negociación con CIL, se mantienen conversaciones con otros actores del sector energético internacional. La Planta Industrial de Agua Pesada recibió recientemente una visita de la empresa canadiense Candu Energy Inc., interesada en evaluar posibles contratos de largo plazo para abastecer sus reactores Monark.
La reactivación de la PIAP requerirá una inversión estimada en 60 millones de dólares para completar un proceso de alistamiento de 20 meses. La concreción de contratos de venta firmes será fundamental para financiar esta etapa, ya que el Estado nacional no prevé destinar fondos para la reactivación de la planta.
