Crimen en Bariloche: la Justicia ordenó la detención de un policía

El pasado sábado 29 de octubre, el joven Santiago Arriagada fue encontrado sin vida en las inmediaciones del santuario del Gauchito Gil en la avenida de Circunvalación, en Bariloche. En este contexto, el juez Sergio Pichetto formuló los cargos contra Luis Ángel Díaz por el homicidio de su presunto hijo.

Asimismo, el funcionario de la localidad rionegrina ordenó la extracción de sangre para acreditar el vínculo con Santiago Arriagada y dispuso una investigación de cuatro meses. Díaz quedará bajo arresto en la comisaría de Bariloche hasta el 27 de marzo, por riesgo de fuga.

Fundamentos de la fiscal

Por su parte, la fiscal jefe Betiana Cendón le atribuyó a Díaz “haber dado muerte a su hijo menor, a través de un mecanismo que está siendo investigado”. La letrada de Bariloche se refirió a una asfixia que habría provocado el paro cardiorespiratorio de Santiago, lo que terminó con su vida.

Además calificó lo ocurrido como homicidio agravado por el vínculo, y detalló que “luego -del crimen- ubicó el cuerpo en el santuario, lo desnudó dejándole una remera, lo cubrió con chapas y maderas del lugar y fue descartando los efectos del menor hasta llegar a su vivienda”.

Cendón resaltó que como la última persona que vio a Santiago fue Díaz, se lo trató de ubicar. Sin embargo, según informó la fiscal “dijo que se habían encontrado en el shopping, que estaba pautado y que había sido una charla normal. Que él había salido por el estacionamiento con su vehículo y el menor, por calle Gallardo”.

Díaz nos estaba mintiendo porque cuando sale del estacionamiento, Santiago se sube a su camioneta.

Asimismo, la fiscal explicó que días más tarde Díaz apareció en coma a las orillas del río Nirihuau, en un intento de quitarse la vida, y fue trasladado al hospital Ramón Carrillo de la ciudad; cuando recupero la consciencia, le confesó a su otro hijo que había cometido el crimen.

Por último, Cendón especificó: “Díaz le aseguró que la idea era llevar a Santiago a Dina Huapi. Habían discutido tres veces en el trayecto y, en la última discusión, en la zona del Gauchito Gil, lo bajó a la fuerza de la camioneta, lo arrojó al piso, lo envolvió con una manta y, cuando se dio cuenta, Santiago ya no respiraba”.