Hallaron el cuerpo sin vida del docente desaparecido en Roca

Tras 21 días de desolación y una intensa búsqueda, se concretó el peor final. Ayer, un pescador avistó el cuerpo sin vida de Pablo Iglesias Cortina flotando en el río Negro, a unos 3 kilómetros del balneario de Mainqué. Se trata del docente de Roca que desapareció el pasado 11 de junio en el puente de Paso Córdoba.

Aparentemente, el pescador vio el cuerpo e inmediatamente avisó a efectivos de Prefectura Naval. Minutos después, se acercaron al lugar y constataron que se trataba del docente que era buscado desde hace días en la localidad rionegrina.

Según se indicó, el cuerpo de Pablo Iglesias Cortina fue trasladado a Roca para efectuar las pericias correspondientes y determinar las causas del deceso. No obstante, las observaciones preliminares de la Policía de Criminalística y del cuerpo médico forense detallaron que el cuerpo no presentaba rastros de violencia y estaba en buen estado de preservación.

Cabe destacar que, además de Prefectura Naval, intervinieron en el operativo efectivos policiales de la subcomisaria N° 66 y personal de bomberos. En concreto, colaboraron con las maniobras para retirar el cuerpo del agua y el posterior traslado hasta la morgue judicial de Roca. Una vez allí, actuaron el fiscal, un médico legista y el gabinete de Criminalística de la Policía de Río Negro.

Primeros indicios tras el hallazgo

Luego de conocerse la trágica noticia del fallecimiento del docente Pablo Iglesias Cortina de Roca, surgió con intensidad la primera hipótesis inicial. De acuerdo a lo relatado por Diario Río Negro, los peritos estiman que el cuerpo del docente estaba sumergido y atrapado en la vegetación del río Negro desde hace varios días. Sin embargo, fue posible divisarlo, muy probablemente, porque el caudal del curso de agua aumentó de forma considerable e hizo que emergiera a la superficie y fuera arrastrado hacia la zona de Mainqué.

Cronología de los hechos

Pablo Iglesias Cortina fue visto por última vez el pasado 11 de julio en el puente de Paso Córdoba, cuando estacionó su auto, un Chevrolet Corsa color gris, en dicha zona de Roca. A las pocas horas de su desaparición, la división canes de la Policía efectuó múltiples rastrillajes, pero los perros no lograron marcar un rastro. A consecuencia de ello, todos los operativos de búsqueda se centraron en el cauce del río Negro en esa área y las primeras suposiciones daban cuenta de un presunto suicidio.