Debido a las sanciones a Rusia, la fruticultura le pedirá una ayuda millonaria al Gobierno nacional

La invasión de Rusia a Ucrania y las consecuentes sanciones hacia el país presidido por Valdimir Putin trajeron complicaciones a todo el mercado internacional. Uno de los sectores afectados fue el de la exportación de peras y manzanas del Alto Valle.

Debido a estas dificultades que constan del cierre de exportaciones a Rusia, desde diferentes áreas del sector productor rionegrino y neuquino se le solicitó al Gobierno nacional ayuda financiera, ya que las sanciones económicas a la nación euroasiática generaron complicaciones en el departamento.

A su vez, tras estas medidas sobre Rusia, el sistema bancario es reacio a entregar préstamos a las empresas en un contexto de falta de previsibilidad. Pues, muchos de los fondos que ingresaron en esta parte del año al Valle de Río Negro y Neuquén fueron anticipos de los importadores rusos por las exportaciones de la región que hoy no llegan a destino.

De acuerdo con los empresarios del sector, la fruticultura necesitaría una inyección de fondos de unos 30 millones de dólares, para poder dar continuidad a la temporada y cancelar deudas con proveedores. 

Estos fondos son los que reclamarían al Gobierno Nacional en la próxima reunión del sector con las autoridades del Ministerio de Agricultura, junto con beneficios impositivos que serían de significativa ayuda en este momento.

Declaraciones de la CAFI 

Acerca de la situación, el gerente general de la CAFI (Cámara Argentina de Fruticultores Integrados), Marcelo Loyarte, señaló que “el escenario es muy complicado. Todos estamos buscando soluciones para ver cómo reorientar la fruta que estaba prevista para ser colocada en Rusia”.

El ejecutivo aseguró que el cierre del mercado del país euroasiático traerá efectos directos sobre la actividad y que durarán mucho tiempo. Por su parte, indicó que la pérdida por la fruta que no llegó a destino se puede reorientar hacia otros mercados, pero se producirá una sobreoferta que influirá sobre el precio final del producto.

“Tenemos la esperanza de que esto termine lo más pronto posible, porque Rusia es un mercado importante para nosotros; inclusive en el segundo semestre del año”, sostuvo Loyarte e informó que el principal problema está en la pera, porque es un producto para redireccionar.