Solo dos horas de lluvia intensa fueron suficientes para inundar las calles de Neuquén

Después de mucho tiempo sin que llueva en Neuquén, un intenso diluvio de tan solo dos horas ocasionó la inundación de calles y comercios. El agua se metió en las casas e hizo colapsar gran parte del sistema de cloacas que hay en la ciudad. 

En la calle Belgrano, en el sector entre Combate San Lorenzo y calle Colón, sobre las alcantarillas brotaba agua desde las profundidades. El color turbio del agua mezclada con arcilla y el olor a cloacas invadían todo el trazado de una de las principales arterias de Neuquén. Al llegar a las intersecciones el agua descendía violentamente, como si se tratara de un correntoso arroyo que corría por encima de las veredas. 

Como cualquier día laboral, Mariana dejó su auto estacionado en Nordestrom y Richieri. Al terminar su jornada vio que su auto estaba hasta la mitad de agua. No sabía qué hacer ni a quién llamar. Marcos vive a unos pocos metros de ahí y ya se había encargado de cortar el tránsito entre 12 de Septiembre y Leguizamón. “Nos pasamos de agua como todas las veces que llueve”, comentó.  

Marcos comentó que en algunas casas de sus vecinos entró agua y también se inundaron sus autos. “Defensa Civil nunca vino a ayudar, nunca vino a destapar un caño”, señaló y agregó que siempre sucede lo mismo cada vez que llueve con intensidad.  

Nico inauguró su carnicería hace pocas semanas en la esquina de Leguizamón y Alcorta. Cuando vio que comenzó a acumularse el agua en la esquina, intentó poner contenedores para cortar el tránsito, pero comentó que un policía no se lo permitió. El agua comenzó a subir, y junto a unos vecinos, decidieron sacar restos de basura de los sumideros y organizar el tránsito. Sin embargo, los conductores de las camionetas no bajaron la velocidad y las olas hicieron filtrar el agua al interior del local. 

El fenómeno de las tapas de cloacas levantadas por la presión de agua fue más notorio en la zona del Bajo. La inundación sobre esquina de Richieri y San Luis ya es un clásico problema sin solución. Cerca de allí, la intersección de Avenida Olascoaga y Copahue ya tenía colocadas cintas de peligro para evitar el paso del tránsito.

Sobre Copahue, el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) no ha podido solucionar en cuatro años un viejo problema estructural en sus instalaciones. En un tramo que abarca cinco cuadras continúan a la vista los socavones en el asfalto, producto de la erosión de un río de cloacas subterráneo. 

La zona comercial de calle Lainez entre Planas y Alcorta, estaba completamente llena de agua hasta el nivel de la vereda. Allí sí habían realizado obras pluviales en el 2018 para evitar las reiteradas inundaciones en ese sector. “Esta obra va a atenuar los efectos de las lluvias. Ayudará a solucionar un problema viejo”, había comentado el intendente Horacio “Pechi” Quiroga cuando habían comenzado los trabajos.      

Cinco vecinos intentaban destapar la rejilla sobre calle Corrientes y Vicente López y Planas. Uno de ellos mostró las chapas patentes que había encontrado y otro hacía señas a los conductores para que se desviaran sobre el extremo derecho de la calle y evitaran quedarse a mitad de camino en medio del impresionante charco de agua. En ese sector pasa el arroyo Villa María, cuyo afluente  fue recientemente entubado para mejorar el drenaje de la ciudad.   

El subsecretario de Medioambiente y Protección Ciudadana, Francisco “Pancho” Baggio comentó que, según sus registros, se acumularon 40 milímetros de agua y agregó que el pluviómetro había marcado los 30 milímetros apenas transcurrieron las dos horas del aguacero que comenzó a partir de las 10.30 horas. 

“Mucha agua en poco tiempo y el drenaje es muy lento”, subrayó Baggio.  El funcionario municipal comentó que en la zona comercial del bajo se desagotó a partir de las 17 horas. Baggio agregó que una de las principales razones de la inundación  fue que está muy alto el caudal del río Limay y el arroyo Durán, que atraviesa gran parte de la ciudad, tardó en descargar.

Esteban Rodríguez, el gerente general de Servicios del EPAS comentó a Minuto Neuquén que hay una deficiencia parcial del sistema pluvial que produce el anegamiento de calles. También mencionó que influye el uso de la red cloacal para evacuar desde los domicilios el agua de lluvia acumulada. “Esto satura totalmente las redes, se genera un caudal extraordinario que supera la capacidad de transporte de las cañerías cloacales que no fueron diseñadas para ese fin”, comentó.