REALEZA
Que en paz descanse: la tristeza no tiene fin para el Rey Juan Carlos
Día sensible para el emérito.
El emérito Rey Juan Carlos ha recibido una de las noticias más difíciles de asimilar en los últimos tiempos, más allá de los escándalos de corrupción y su relación acabada con su hijo el Rey Felipe, Juanito ha perdido a su amigo del alma, a su compañero de aventuras, al inolvidable Carlos Falcó la semana pasada. Y hoy se realizó el funeral, a la cual no pudo asistir Juan Carlos.
Se trata de una despedida al hermano de corazón del Rey Juan Carlos que representa el dolor que sufre toda España, el país que lamentablemente este miércoles ha superado a China en víctimas fatales: el número de fallecidos asciende a 3.434, después de que se registraran 738 fallecimientos en las últimas 24 horas.
En este difícil contexto con epicentro en Madrid, el padre de Tamara Falcó no ha podido ser enterrado con los honores que merecía y con un solemne funeral al que hubiera querido asistir el Rey Juan Carlos para brindarle su más sentido pésame, algo que no ha podido suceder.
Como tristemente marca el protocolo en casos de víctimas por el coronavirus, se informó a los hijos de Falcó que, a diferencia de lo que ocurrió por ejemplo con la hermana del Rey Juan Carlos en enero, el cuerpo debió ser incinerado: "Los hijos cumplieron el protocolo a rajatabla y lo cumplirán en lo que se refiere al tratamiento de los restos mortales de su padre", indicó el comunicado.
La afirmación consignada por Vanitatis se ha cumplido al pie de la letra: el amigo del Rey Juan Carlos fallecía el pasado viernes por culpa del covid-19 solo: durante sus últimas horas estuvo aislado y su despedida tampoco ha sido como esperaban sus hijos: el marqués de Griñon fue despedido en la más estricta intimidad.
El Gobierno español de Pedro Sánchez, en una decisión que han aceptado desde la corona española incluido el Rey Juan Carlos, ha estipulado que la despedida de los fallecidos sea con todas las medidas de seguridad y prevención necesarias y sin contacto físico. Eso mismo es lo que ha pasado con Carlos Falcó.
El crematorio Sur de Madrid fue el escenario de la despedida: solo participaron tres de sus hijos, Manolo, el heredero del título, que voló desde Londres para la ceremonia; Xandra, su mano derecha en la empresa, y Tamara, la niña de sus ojos quien ha conmovido hasta las lágrimas al mismísimo Rey Juan Carlos con una publicación en Instagram.
El último adiós, consignó la familia cercana al Rey Juan Carlos, de ningún consuelo les ha servido y las imágenes en la tapa de las revistas lo dice todo: protegidos con mascarillas y guantes, cumpliendo la distancia de seguridad en todo momento y sin siquiera poder abrazarse ni tocarse los tres hijos han despedido a su padre. Desgarrador.
