REALEZA
Puso fin a su vida y el calvario sale a la luz: la Reina Isabel está en vilo
Los dolores de cabeza no cesan pese al confinamiento.
La Reina Isabel se encuentra confinada en el Castillo de Windsor desde que comenzó la cuarentena y reparte su tiempo en el cuidado de su marido el Duque de Edimburgo, las decisiones que delega en su nieto William y puntualmente qué pasa con sus hijos: la salud del Príncipe Carlos, el confinamiento del Príncipe Eduardo y la Princesa Ana, y especialmente el Príncipe Andrés.
El Príncipe Andrés es el segundo hijo de la Reina Isabel y es lamentablemente el protagonista de un calvario que salió a la luz cuando su amigo, Jeffrey Epstein, puso fin a su vida en una celda. Es un calvario que ya venía padeciendo Andrés, pero que ahora se potencia y ni el coronavirus le ha dado un descanso.
Los tiempos judiciales en Estados Unidos continúan y el escenario comienza a complicarse para el Príncipe Andrés, quien con el apoyo de la Reina Isabel ha intentando rehabilitar su imagen pública, pero eso se está convirtiendo en una misión imposible: la amistad con el millonario Jeffrey Epstein es un verdadero dolor de cabeza para la Familia Real británica.
El 'Daily Mirror' se ha encargado de llevar las malas noticias para la Reina Isabel: los abogados de las víctimas de Epstein han solicitado en detalle todas las llamadas realizadas y mail entre Epstein y el Príncipe Andrés. Desde el entorno del hijo de la Reina indicaron que "es un intento cínico de la Justicia estadounidense para mantener el caso en la atención pública".
Los abogados que demandan al hijo de la Reina Isabel pidieron toda la información que intercambió con Epstein, al igual que los detalles de las visitas que el Príncipe Andrés le hizo a Epstein en sus distintas propiedades inmobiliarias hasta que fuera trasladado a prisión donde terminó con su vida.
La noticia que golpea a la Reina Isabel y confirma el mayor temor del Príncipe Carlos sobre su hermano se comunica luego de saber que el Príncipe Andrés se había negado a cooperar con el FBI: "Ha cerrado por completo la puerta a la cooperación voluntaria y nuestra oficina está considerando sus opciones".
El hijo de la Reina Isabel, cuando comenzó el drama, había tenido otra postura: "Por supuesto, estoy dispuesto a ayudar a cualquier agencia de aplicación de la ley apropiada con sus investigaciones, si es necesario". Antes de que llegara esta notificación, la gran reaparición pública del Príncipe Andrés sería en la boda de su hija Beatriz de York, pero la misma está postergada a efecto de los tiempos que dure el confinamiento.
