REALEZA
"Hoy es un día muy especial": el mensaje de la Reina Isabel junto a su familia
Continúa confinada en el Castillo de Windsor.
La Reina Isabel ha demostrado una sensibilidad inusitada conforme a los tiempos que corren marcados por la pandemia provocada por el coronavirus: pocas veces ha sido protagonista de mensajes públicos que llegan al corazón de los británicos como ahora.
Confinada en el Castillo de Windsor junto a su marido el Duque Felipe de Edimburgo, la Reina Isabel creía haberlo visto todo en sus 68 años al trono hasta que la crisis más grave desde la Segunda Guerra Mundial se instaló con fuerza en cada ciudad del Reino Unido.
Reticente al principio de expresar sus sentimientos ante lo vivido, ni siquiera el positivo de su hijo el Príncipe Carlos había motivado que la Reina Isabel rompiera el silencio. Tomó un curso acelerado de videollamadas y a través de la BBC también transmitió sus palabras en una cadena nacional sólo destinada a los momentos históricos que han marcado al mundo.
La Reina Isabel también ha sufrido el positivo del premier Boris Johnson, quien al igual que el Príncipe Carlos se recuperó favorablemente del coronavirus. Pero detrás de tanto dolor hay héroes: Su Majestad y su familia han querido dar las gracias.
Este martes 12 de mayo se conmemora en todo el mundo el Día Internacional de la Enfermería, como nunca, el mundo ha valorado el esfuerzo sin tiempo de los trabajadores de la salud como lo visto este año y la Reina Isabel ha querido ser parte de ello.
“Hoy es un día muy especial. Es esencial que la población se una a la celebración de este Día Internacional de la Enfermería porque obviamente han tenido un papel muy importante en la reciente crisis sanitaria”, ha indicado la Reina Isabel.
“Mi familia y yo queremos dar las gracias a todos los enfermeros y enfermeras no solo del país, sino del mundo. Gracias desde el fondo de mi corazón”, adhiere el Príncipe Carlos, hijo de la Reina Isabel, junto al resto de los royals, en un gesto cálido y humano que ha trascendido todas las fronteras. A ellos, enfermeros y enfermeras de todo el mundo, eterna gratitud.
