Los duques de Sussex y una noticia que les preocupa: las fuerzas de seguridad ya fueron notificadas
Un evento muy extraño sucedió en su nueva casa.
El príncipe Harry y Meghan Markle vivieron juntos un evento que los alteró a tal punto de llamar a la policía en estos últimos días en su casa de la ciudad de Los Ángeles.
Harry y Meghan llevan pocos meses en los Estados Unidos en lo que es su nueva vida alejada de la realeza británica. Desde allí se siguen dedicando a viejos y conocidos asuntos, como las organizaciones de ayuda humanitaria.
El príncipe ahora está preocupado por su seguridad y también la de su pequeño hijo Archie. De hecho, instalaron una cerca protectora para evitar a los curiosos.
Lo que llamó la atención del inglés es que estos últimos días ha descubierto la presencia de al menos cuatro drones en su vivienda, los mismos se encontraban sobrevolando el lugar a una baja altura.
Uno de los aparatos alertó a la familia del británico cuando estos disfrutaban de un merecido baño en la piscina a la luz del sol. El temor se incrementó en los duques de manera razonable por miedo un acto terrorista y decidieron llamar a la policía local.
Muchos son los medios de aquel país del norte afirmando que los drones tendrían que ver con las amenazas que recibió Meghan en estos últimos años desde su unión con el hijo del príncipe Carlos.
"No piden ningún tratamiento especial, solo quieren que se respete la seguridad que todos esperamos que se respete en nuestras casas".
La vivienda donde se están quedando la norteamericana y el famoso está valuada en unos 16 millones de euros y se encuentra en un lujoso vecindario rodeado de múltiples estrellas en la ciudad de Los Ángeles.
