"Ni mi familia lo sabe": Gladys La Bomba Tucumana contó un estremecedor episodio de su infancia
Gladys La Bomba Tucumana hizo público una tremenda vivencia de cuando tenía 10 años.
El tema más resonante de los últimos días en todos los medios fue la controversial entrevista que brindó Mavys Álvarez para contar las penurias que vivió al lado de Diego Maradona, y esto impulsó una gran cantidad de testimonios y opiniones cruzadas. Más allá del tema en cuestión, que de por sí es muy delicado, hubo quienes se animaron a hablar sobre sus propias experiencias, tal y como lo hizo hoy Gladys La Bomba Tucumana.
La reconocida cantante hizo público un estremecedor recuerdo de su infancia cuando un hombre mayor que vivía cerca de su casa habría querido sobrepasarse con ella, pero que afortunadamente no lo logró. "Se abre un abanico para que mucha gente pueda animarse a contar lo que le pasa, más siendo un niño. Yo nunca hablé de esto, lo voy a hacer acá donde me siento muy cómoda. Ni mi familia lo sabe", comenzó su relato en "A la Tarde".
Luego, Gladys dio los detalles sobre esta traumática experiencia y agradeció a la crianza que recibió, la cual fue clave para que la cosa no pasara a mayores: "Yo tenía un vecino que siempre trataba de llevarme para subirme arriba de sus piernas, yo tenía 10 años. Yo le rehuía, le tenía pánico. Mi mamá me preguntaba si me había pasado algo, y yo le decía que no quería acercarme a él. Todo eso se debía a la enseñanza que venía de mi casa, de mi madre que no tenía ni el secundario completo. Si no fuera por eso esta persona me habría manoseado, pero yo nunca dejaba que llegue a eso".
El apoyo de sus compañeros
El relato de La Bomba Tucumana dejó muy shockeados a todos sus compañeros, pero igualmente recibió unas palabras de aliento por parte de ellos. Primeramente fue la conductora, Karina Mazzocco, quien le dijo "Dejame que te corrija algo: no era ni una enseñanza ignorante ni a lo bruto. Ella te supo dar las herramientas". Por su parte, Luis Ventura intervino para agregar: "Los buenos modos y las cercanías afectivas son el vehículo más directo y más fácil para promover el abuso. Es decir, el abuso violento no es el que abunda, sino el cercano y que viene del afecto".
