NATALIA OREIRO
Así es la fastuosa casona donde Natalia Oreiro vivió en Buenos Aires
La residencia de la actriz uruguaya queda en pleno centro de un conocido barrio porteño.
No hay porteño que no haya pasado por su puerta. Más allá del hermetismo que durante años mantuvo Natalia Oreiro sobre su hogar, la fastuosa residencia que está enclavada en pleno barrio de Palermo es conocida por fuera por muchos fans y curiosos.
Sin embargo, por dentro, la residencia donde Natalia Oreiro vivió durante 18 años con su pareja, Ricardo Mollo, guarda historias y una decoración de ensueño. La propiedad tiene ahora otros dueños, pero la actriz uruguaya vuelve cada tanto por un particular motivo.
La casona que perteneció a Natalia Oreiro fue construida en 1887 por la familia Alvear y ella la adquirió cuando tenía 21 años. Hace un tiempo se vendió, pero un espacio todavía es de su propiedad porque allí se encuentra el estudio de ensayo y grabación, según menciona una nota de La Nación.
En el jardín, uno de los lugares más atractivos de esta casa que perteneció a la actriz de “Ricos y Famosos”, hay un baño exterior con puerta de madera lustrada y elegantes azulejos azules, que disimulan la entrada gris del espacio que aún conserva.
La casa se encuentra en el Pasaje Santa Rosa, a metros de la placita Serrano, y en su frente hay un mural con llamativos colores. Durante mucho tiempo lució un color rosa pálido y se la conocía como “la casa rosa del pasaje Santa Rosa”.
Una vez traspasada la puerta de ingreso, se puede ver el espacio más llamativo: el jardín que cobija una palmera, camelias en flor, álamos y un ginkgo biloba. En relación con su estructura, la residencia es muy amplia y cuenta con tres dormitorios y cinco baños. El terreno mide unos 700 metros cuadrados.
El lugar secreto
Durante algunos años, cuando los fans iban a cantarles a la puerta de la casa, Natalia Oreiro y Ricardo Mollo usaban el estudio de grabación para dormir más tranquilos, ya que cuenta con un sistema acústico que los preserva de los sonidos externos.
Ahora es el lugar donde la actriz vuelve cada tanto, porque está separado y no formó parte del paquete cuando se vendió la propiedad. Con puerta al jardín, la casona es un oasis que conserva el verde y el canto de los pájaros.
