Sin químicos, barato y fácil: la forma más efectiva de limpiar tu horno

Mantener limpios nuestros hornos es esencial para mantener una cocina sana e higiénica. Sin embargo, puede ser difícil y llevar mucho tiempo, ya que requiere productos químicos agresivos y esfuerzo. Afortunadamente, existe una alternativa natural y asequible que no sólo limpia eficazmente, sino que también te ahorra dinero y tiempo. En este artículo te explicamos la forma más efectiva de limpiar este artefacto con ingredientes básicos.

¿Por qué evitar los productos químicos en la limpieza del horno?

Muchos de los limpiadores de hornos convencionales del mercado están hechos con productos químicos agresivos que son tóxicos y dañan nuestra salud, sobre todo si se utilizan en un espacio cerrado. Se sabe que el hidróxido de sodio, también conocido como soda cáustica, provoca quemaduras y problemas respiratorios. Además, son perjudiciales para el medio ambiente y contribuyen a la contaminación del agua.

Las ventajas de utilizar ingredientes naturales

• No son tóxicos: el bicarbonato sódico, el vinagre, la sal y el limón son ingredientes naturales que no contienen toxinas dañinas. Son seguros para niños y mascotas, y no suponen ningún riesgo para la salud.
• Baratos: son básicos baratos y fáciles de conseguir, además de una alternativa económica.
• Eficaces: aunque no actúen tan rápido como los limpiadores químicos, siguen siendo eficaces para eliminar las manchas y la grasa difíciles del horno y lo dejan con un olor fresco y limpio.
• Respetuoso con el medio ambiente: reduce la cantidad de productos químicos nocivos que se vierten por el desagüe, contaminando nuestras aguas.

Los ingredientes que necesitarás para limpiar el horno

1. Bicarbonato de sodio: es un abrasivo suave que ayuda a eliminar la suciedad y las manchas del horno sin arañar la superficie. También neutraliza los olores desagradables, dejándolo fresco y limpio.
2. Vinagre blanco: disuelve la grasa y la suciedad y elimina las manchas difíciles.
3. Sal: elimina la suciedad y la grasa adheridas.
4. Limón: tiene propiedades antibacterianas naturales y es eficaz para eliminar la grasa y la suciedad y deja el horno con un olor fresco y limpio.

El proceso paso a paso

• Retira las rejillas y cualquier otro elemento suelto.
• Haz una pasta espesa mezclando media taza de bicarbonato sódico con unas cucharadas de agua.
• Aplica la pasta por toda la superficie, incluida la puerta, con un paño limpio o una esponja. Asegúrate de cubrir todas las zonas con marcas de grasa y manchas difíciles.
• Deja actuar durante al menos una hora. Cuanto más tiempo la dejes, más eficaz será.
• Mientras tanto, prepara una solución limpiadora mezclando una taza de vinagre blanco con una cucharada de sal en una botella pulverizadora.
• Pasada una hora, pulveriza la solución sobre la pasta.
• Corta el limón por la mitad, exprime el jugo sobre el horno y déjalo reposar por una hora más.
• Con un paño húmedo o una esponja, limpia la pasta, el vinagre y el jugo de limón. Si quedan manchas rebeldes, frota un poco más.
• Enjuaga el paño o la esponja y limpia el horno una vez más para eliminar los restos.
• Vuelve a colocar las rejillas y otros objetos.