CABELLO

Cómo limpiar tu cepillo para el cabello y que quede como recién comprado

Es un tip que te ayudará a que se vea impecable y libre de residuos.
viernes, 22 de marzo de 2024 · 05:09

Si queremos garantizar, tanto a nosotros mismos como a quienes nos rodean, un estado de salud óptimo, y evitar al mayor grado posible contraer distintas enfermedades, no solo la alimentación es fundamental, sino también la limpieza. Entre los tantos elementos que abundan en nuestro hogar y que no podemos dejar de mencionar, tenemos al cepillo para el cabello.

Una correcta limpieza de nuestro cepillo garantizará que nuestro cabello esté saludable.

El cepillo para peinarnos es un objeto que utilizamos a diario y que, si no cuidamos y limpiamos de manera apropiada, puede terminar causando efectos negativos sobre nosotros, particularmente sobre nuestra melena, y producto de la acumulación tanto de polvo como de aceites esenciales que nuestro cabello desprende todos los días.

Lo primero que tenés que saber sobre la limpieza del cepillo de pelo es que, valga la redundancia, es clave comenzar el proceso retirando los pelos que hayan quedado depositados en sus cerdas, para luego proceder con un efectivo procedimiento y la creación de una mezcla que lo dejará como nuevo.

Este tip te ayudará a que el cepillo se vea siempre como nuevo.

Una vez que hayas retirado el cabello que allí se acumuló, lo siguiente que vas a hacer es colocar sobre un recipiente lo suficientemente grande como para que entre el cepillo ingredientes como lo son el agua tibia y un shampoo suave o, caso contrario, un poco de bicarbonato de sodio. A continuación, vas a mezclar muy bien hasta que el líquido integre muy bien todos ellos.

Utilizá un cepillo de dientes viejo o un paño húmedo para limpiarlo.

Es en este momento donde vas a colocar sobre dicha mezcla el cepillo para el cabello, y una vez que esté lo suficientemente empapado, vas a comenzar a fregar toda su superficie con ayuda de un cepillo de dientes viejo que tengas dando vueltas en casa. Finalmente, enjuagalo con agua limpia y dejá que se seque boca abajo, y sobre una toalla limpia.

Un detalle no menor y que tenés que recordar antes de comenzar con el procedimiento es que si el cepillo para el cabello es de madera, no tenés que sumergirlo en la mezcla, sino solo sobre las cerdas, para luego usar un paño con un poco más de dicha mezcla o el cepillo de dientes.