Espionaje ilegal en la AFI: confirman que hubo un plan para meter preso a Hugo Moyano
Su hijo Pablo también habría estado en la mira.
Los avances en la causa de espionaje ilegal de Cambiemos llevaron a una supuesta certeza: este mecanismo ilegítimo dirigido por el expresidente Mauricio Macri, habría tenido como uno de sus objetivos llevar a la cárcel al referente del gremio de los camioneros, Hugo Moyano.
Según un informe publicado por Tiempo Argentino, un exagente se sumó a ciertas pruebas recabadas por el juez titular de la causa que conmueve al país, Federico Villena. Este acto de espionaje no habría estado dirigido solamente al líder de Camioneros, sino también a su hijo Pablo.
La familia de Moyano forma parte de la lista que integran dirigentes, políticos y periodistas, que teóricamente habrían sido espiados por el gobierno anterior. En este caso, se buscaban argumentos para enjuiciar y posteriormente llevar a prisión a los sindicalistas.
Recordemos que este tipo de actos espurios rompen con el marco de la instituciones debido a que no es legal escuchar conversaciones cuando hay terceros involucrados en la maniobra. Como es sabido, sí se pueden grabar conversaciones si ambas partes realizan la llamada de forma voluntaria, y no hay intereses de otros actores involucrados.
Villena contó con el aporte de Jorge “El Turco” Sáez para corroborar que la familia del referente de los camioneros fue espiada. El expolicía integraba un grupo de espionaje junto con el abogado Facundo y el exintegrante de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, Leandro Araque.
Según la versión más asentada acerca de los motivos por los cuales el Gobierno de Cambiemos habría querido meter preso a Moyano, desde aquella gestión percibieron luego de una masiva marcha organizada por el sector transportista que podían encontrar en el gremialista un rival político de cara a 2019.
En cuanto a su realidad sindical, el presidente del Club Atlético Independiente se encuentra atravesando una situación muy compleja debido a las grandes quejas que presentan sus trabajadores respecto de los malos tratos que reciben al ingresar en distintos distritos del interior.
Según se ha reportado ya varias veces desde que inició el aislamiento social, preventivo y obligatorio, los transportistas han sufrido vejaciones tales como soportar insultos o ser apartados del resto de la población, mientras llevaban insumos esenciales para el abastecimiento de los lugares en cuestión.
