Lucio Dupuy: Una de las acusadas declaró que su intención “jamás fue matarlo”

Una de las acusadas por el crimen de Lucio Dupuy, el menor de 5 años abusado y golpeado hasta su muerte en La Pampa, al final de la audiencia de este miércoles decidió declarar. “Mi intención jamás fue lastimarlo y mucho menos matarlo. Me duele en el alma, lo extraño mucho”, confesó  Abigail Páez.

Páez es una de las dos mujeres juzgadas por el asesinato de Lucio Dupuy, quien ante el Tribunal de Audiencias en la ciudad de Santa Rosa, detalló todo lo que hizo el día del crimen y concluyó su declaración en la 14° jornada del juicio, donde ya pasaron 61 testigos frente al tribunal integrado por la jueza Alejandro Ongaro y los jueces Andrés Olié y Daniel Sáez Zamora.

Magdalena Espósito Valenti, la madre de Lucio, prefirió retirarse de la sala al momento de la declaración de su pareja Abigail. El letrado de la mujer, Pablo De Biasi, dijo que ella no escucharía el testimonio ni siquiera por los parlantes.

Ocho testigos requeridos por las defensas públicas también dieron sus testimonios. Las primeras cuatro los hicieron vía Zoom, por estar en localidades pampeanas y en Buenos Aires. Fueron tres médicas del hospital Gobernador Centeno, ubicado en General Pico, y una joven que vendía entradas.

Se especificó que dos de los tres médicos atendieron al nene en la guardia del hospital, entre 2019 y 2020, “por una herida cortante superficial, un traumatismo, una otitis y una faringitis”. Mientras que la joven, desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, detalló los mensajes que mantuvo por Whatsapp con Páez el mismo 26 de noviembre, al venderle dos entradas para un evento que se realizaría en la madrugada del sábado 27.

El crimen del pequeño

En la reconstrucción de los hechos que hicieron los fiscales del caso, establecieron que Lucio recibió una brutal golpiza entre las 17:30 y las 19:40, dentro del departamento que compartía con Magdalena, su madre, y la pareja de ella, Abigail, ubicado en la calle Allan Kardec 2.385 de la capital pampeana.

Una cámara de seguridad registró a las mujeres cuando salieron de la vivienda a las 19:30 horas y dejaron sólo al menor. Minutos después, en la grabación se observa que solo vuelve Páez, quien luego llevó al menor a una posta sanitaria del barrio Río Atuel, ya que se había descompensado por los golpes. La autopsia posterior determinó que la muerte se produjo por una “hemorragia interna”, producto de las agresiones.