Impunidad: se cumplen 17 años de la desaparición de Sergio Ávalos

La conmemoración se realizó de manera virtual.
domingo, 14 de junio de 2020 · 16:26

Este domingo se llegó al aniversario número 17 de la desaparición de Sergio Ávalos. El estudiante cursaba en la Universidad del Comahue, haciendo la carrera de Economía. Luego de ir a bailar con sus compañeros una noche del año 2003, nadie volvió a verlo con vida.

El hombre de Picún Leufú se estaba divirtiendo junto a otros estudiantes en un complejo bailable llamado Las Palmas. Según fuentes, al retirarse del establecimiento, los jóvenes se dispersaron y no volvieron a dar con él. La familia realizó la denuncia, y el caso es presentado como "desaparición forzada".

Según recabó el medio "Mejor Informado", hubo testigos que declararon que el neuquino habría sufrido un maltrato por algún malentendido. "A Sergio lo golpearon por haber visto o escuchado algo y se les fue la mano al personal de seguridad", reza una de estas hipótesis.

Debido al contexto de emergencia sanitaria por coronavirus, los actos conmemorativos por el supuesto crimen contra Ávalos debieron realizarse de manera virtual, como ha ocurrido con diversas fechas que solían representar la aglomeración de personas en las calles.

La mañana en que se confirmó que estaba desaparecido, el estudiante tenía pensado partir a su pueblo natal para visitar a su padre, en su día. El hecho cobró trascendencia rápidamente y fue desplegado hacia la órbita de la Justicia Federal, que pasó a liderar las investigaciones.

Actualmente, hay sospechas sobre el personal de seguridad del boliche, que según la misma fuente habría pertenecido en su mayoría a las fuerzas policiales, o eran militares que dejaron de cumplir sus funciones en el Estado. A su vez, según los dueños del boliche, las cintas de grabación de las cámaras de seguridad estaban en mal estado, lo que complica la causa.

Otro caso rutilante producido en Neuquén fue el crimen perpetrado por un policía en medio de una disputa gremial, y que terminó con la vida del docente Carlos Fuentealba. El hecho ocurrió el 4 de abril del año 2007, y generó duras críticas para el Gobierno de Néstor Kirchner a nivel nacional, y de Jorge Sobisch a nivel provincial.

Fuentealba pertenecía a la organización ATEN, nucleada en la CTERA. Su nombre pasó a ser utilizado para múltiples agrupaciones de índole social en todo el país. El fatídico hecho ocurrió sobre la Ruta 22, en las proximidades de la ciudad de Senillosa.