RECLAMO DE JUSTICIA
A 20 años de la masacre: Darío Santillán y Maxi Kosteki fueron recordados en el puente carretero
La actividad en el territorio patagónico se sumó a la realizada en el partido de Avellaneda, provincia de Buenos Aires, donde tuvo lugar la mortal represión.
Organizaciones políticas y sociales se congregaron este domingo en el puente carretero que une Neuquén y Río Negro en memoria de los líderes piqueteros Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, asesinados el 26 de junio de 2002 por la Policía bonaerense, bajo las órdenes del entonces presidente Eduardo Duhalde, durante la llamada Masacre de Avellaneda.
“Di la orden de que no pasaran”, admitió el expresidente argentino en el documental “Diciembre”, declaración que este año fue incorporada como prueba a la causa que lleva la fiscal federal Paloma Ochoa, por la que se investiga la autoría intelectual de la masacre.
A la actividad realizada en tierras patagónicas asistieron referentes del Frente de Izquierda Unidad, entre ellos el secretario adjunto del Sindicato Ceramista de Neuquén y diputado provincial, Andrés Blanco; los concejales de la capital neuquina, Julieta Katcoff y Esteban Martine; Raúl Esparza, dirigente de ATEN Capital; y la consejera superior de la UNCo Charly Tiersen.
Movilización central en Buenos Aires
Bajo la consigna “La Masacre de Avellaneda es un crimen de Estado”, miles de personas marcharon este domingo desde la estación Darío y Maxi (ex Avellaneda) hasta puente Pueyrredón, provincia de Buenos Aires, donde se realizó un acto con familiares, organizaciones sociales y grupos de derechos humanos.
“Revindicamos sus ejemplos y levantamos la bandera de la UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular) de tierra, techo y trabajo, como en su momento ellos levantaron las consignas de trabajo, dignidad y cambio social”, expresó Dina Sánchez, secretaria adjunta de UTEP y referente del Frente Popular Darío Santillán (FPDS).
Por los asesinatos de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki fueron condenados a prisión perpetua los efectivos policiales Alfredo Fanchiotti y Alejandro Acosta como autores materiales. En 2012 fue archivada una investigación para determinar el papel de Duhalde y sus ministros en la masacre, pero revivió en 2015 por pedido de familiares, a partir de la presentación de nuevas pruebas.
