Monjas de Zaragoza venden sus productos de repostería ante la crisis por el COVID 19

“Las Mónicas” son las monjas de la Orden de las Agustinas, que habitan el Monasterio de Santa Mónica de Zaragoza quienes venían refaccionando un área para la producción de sus productos de repostería .

Finalmente abrieron este sábado pasado como medio de subsistencia y los españoles que vivan en la zona podrán comprar allí los dulces elaborados con materia prima de calidad y buena técnica, según relata una de las monjas, la hermana Gemma.

"Abrimos ahora al ver que ya hay movimiento y se acerca el fin del confinamiento. También nos urgía empezar a trabajar; lo hemos hecho por necesidad y como medio de vida para tener unos ingresos. Nuestra vida está centrada en la oración y el trabajo es la otra balanza"

Según relata en una nota publicada en El Heraldo, son seis las monjas que habitan en el Monasterio y ellas se encargarán de producir y comercializar distintas variedades de masas dulces.

Entre las variedad que ofrecerán a la venta están las polancas (de almendra y crema), glorias (de avellana), rollitos de anís y huevo, lágrimas de Santa Mónica  y rosquillas. Asimismo en próximas semanas también elaborarán las Mónicas, que llevan trocitos de limón confitado y tienen forma de flor.

Pero además, las monjas mantienen su deseo de evangelización ya que cada una de las elaboraciones llevará frases del Evangelio y de algunos santos, como san Agustín.

Y cuentan con distintos elementos de seguridad y protocolo: pantalla de metacrilato y gel desinfectante, llevamos guantes y mascarillas, solo puede estar una persona dentro del local de venta.

Ya habían participado en alguna edición de  encuentros de Elaboración monacal o la Feria de los Dulces del Convento que busca promocionar la labor de monjes, monjas de los conventos/monasterios en los que refiere a repostería monacal.